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La asamblea de Caixa Turís aprobó el pasado miércoles su incorporación al grupo cooperativo liderado por la andaluza Cajamar y del que forman parte otras cuatro entidades rurales de la Comunitat Valenciana: Caja Campo, Albalat, Petrer y Casinos. Turís era una de las veinte rurales que se habían adherido a Cajas Rurales del Mediterráneo (CRM), el grupo liderado por Ruralcaja, que en este momento se encuentra en proceso de ratificación por parte de sus socios. Turís, una entidad con sólo dos oficinas, quince empleados y unos activos de 56 millones de euros, era una de las tres cajas molestas con la forma final en que se ha constituido CRM y muy especialmente por no lograr, por su tamaño, una representación permanente en el futuro consejo rector del grupo.
Turís, entonces, negoció con Cajamar y provocó las iras de Ruralcaja, que extraoficialmente la amenazó con expulsarla por deslealtad. Finalmente, se ha ido con la andaluza, la mayor rural de España. Las otras dos rurales díscolas de CRM -Algemesí y Albaida- parece que no tomarán una decisión sobre seguir o no hasta su asamblea del año próximo. Hay tres de Castelló que también han pedido demorar la toma de una resolución, pero en este caso buscan evitar una posible oposición de sus socios. Las catorce entidades restantes, en principio, ratificarán el acuerdo, como ya ha hecho, por ejemplo, Crédit.
