La subida del tipo general del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) del 16% al 18% a partir del 1 de julio -que es el gravamen que soportan los artículos vendidos en los comercios como la ropa y calzado, electrodomésticos, artículos del textil-hogar o de informática, entre otros- marca el inicio de una temporada de rebajas de verano que el pequeño comercio de Valencia inició ayer, tres días antes que la fecha elegida por las grandes superficies de distribución. Mientras los empresarios del sector descartan que el incremento fiscal tenga una impacto negativo sobre las ventas esperadas hasta el próximo mes de septiembre respecto a 2009, las organizaciones de consumidores afirmaron ayer que se producirá una "regresión en el gasto".

En ese sentido, un estudio elaborado por la Federación de Usuarios-Consumidores Independientes (Fuci) -realizado a partir de una encuesta a más de 2.500 consumidores- sostiene que la Comunitat Valenciana será una de las autonomías más consumistas, aunque el gasto se reducirá a 72 euros por persona, lo que supone una caída del 29% respecto al año anterior y cae a la mitad si lo comparamos con 2006 y 2007, años anteriores a que estallara la crisis financiera y económica. Respecto a las medidas de ahorro previstas, el 34% de los consumidores evitará las marcas, un 27% comparará lo que esté más rebajado y un 35%, sólo lo que necesiten. Sobre las decisiones de compra, Fuci sostiene que sólo una de cada tres comprará algo en período de rebajas, siendo el porcentaje mayor en el caso de las mujeres (63%) que en el de los hombres (35%).

La ropa y los complementos siguen siendo los artículos más demandados en las rebajas. "El hecho de que las rebajas coincidan con el incremento del IVA en dos puntos explica que esta regresión en el gasto, que no va a poder frenar ni los agresivos descuentos [hasta el 70% en algunos casos] que los comercio van a hacer".

Sin embargo, la presidente de la Confederación de Empresarios del Comercio Valenciano (Cecoval), Isabel Cosme, descarta que la mayor carga fiscal "tenga impacto negativo sobre las ventas".

En espera del fin de semana

Cosme reconoció que el primer día de rebajas, cuya afluencia de compradores considera similar al año anterior, corresponde a gente de "consumo retenido, es decir a personas que ya tenían la compra solicitada" Y añadió que "todavía es pronto para analizar la marcha de una campaña que comenzará a tener un claro punto de inflexión el próximo fin de semana, que es cuando la mayor parte de los consumidores pueden efectuar sus compras". También destacó que "la guerra de precios hace tiempo que ha estallado ya en el comercio y además de asumir el IVA para no perjudicar a sus clientes, el comercio mantendrá sus campañas agresivas de precios". Por su parte, el responsable de la asesoría de franquicias Crescenda, Javier Pelayo, afirma que el alza del IVA no tendrá un efecto negativo sobre el consumo que se realiza en las grandes cadenas de franquicias, que en su mayoría absorberá dicho incremento.

Según los datos de que dispone la directora de Comercio, Silvia Ordiñaga, los comerciantes de la C. Valenciana asumirán "en muchos casos" la subida en dos puntos del IVA.

El consumo caerá un 1,1% durante este año

"El aumento de los tipos del IVA tendrán un impacto positivo sobre la recaudación fiscal y un impacto negativo sobre la actividad económica". Prevén una caída del consumo del 1,1% y menor oferta de empleo. Así de contundente se muestra un informe presentado ayer por la escuela de negocios IESE-Universidad de Navarra, que alerta de que la subida es "inoportuna" para la incipiente recuperación, y perjudicará a las rentas más bajas y a los jubilados. El IESE estima que el incremento del tipo general del 16% al 18% y del reducido del 7% al 8% engrosará las arcas del Estado sólo un 1,7%, y prevé que por cada punto extra de recaudación la producción bajará un 0,52%, mientras que las horas trabajadas lo harán en un 0,75%.