Es la lucecita que hasta ahora señalaba si su televisor estaba encendido o apagado. El LED (acrónimo en inglés de Light-Emiting Diode) o diodo emisor de luz se ha convertido en una alternativa a la iluminación tradicional en municipios, polígonos o empresas privadas. Los avances tecnológicos permiten ya que este tipo de lámparas compitan en capacidad de luminidad con las bombillas incandescentes, con la diferencia de que su consumo de electricidad es hasta un 80% inferior y su vida útil puede alcanzar las 50.000 horas. Con este planteamiento desarrolla desde hace dos años su negocio la firma de la Vall D´Uixó, Orienta Renovables. Su carácter innovador no consiste en elaborar un producto capaz de competir con las fábricas asiáticas. Al contrario, tiene en China a sus proveedores. Orienta diseña en España el producto que desea en función de las necesidades de su cliente y posteriormente lo encarga a su fabricante chino. «Estudiamos la posibilidad de instalar una fábrica en España, pero era imposible competir en costes», señala Jacobo Muñoz, director general de la empresa.

Pese a esta circunstancia la aportación innovadora de Orienta al mercado nacional no es baladí. Ofrece reducir hasta en un 80% la factura de la luz a sus clientes. Al margen del ahorro en costes, el menor consumo energético permite además de forma indirecta reducir las emisiones de gases de efecto invernadero a las atmósfera. «Con una bombilla de LEDs de unos 5w se logra un efecto lumínico equivalente a una convencional de 40w. Esto se traduce en una elevada reducción del consumo energético de hasta el 85% frente a las bombillas convencionales», explica Orienta. Asociada a la Fundación Empresa y Clima, Orienta está volcada en sumarse a las iniciativas surgida de los compromisos de emisiones de CO2. La Unión Europea aprobó el 9 de marzo de 2007 el paquete de medidas «Energía para un mundo en transformación», en el que se comprometía a reducir las emisiones de CO2 para el año 2020. Para ello el compromiso es aumentar en un 20% la eficiencia energética y cubrir el 20% de la demanda energética con energías renovables. Fruto de este acuerdo se firmó también el denominado Pacto de Alcaldes por el que los firmantes se comprometían a tratar de lograr esos objetivos en los servicios públicos de sus municipios. «Los alcaldes que de forma voluntaria se adhieren a este pacto se comprometen a tomar las medidas y Orienta se encarga de asesorarles aplicando sus conocimientos en iluminación en LED».

Con esta filosofía Orienta ha desarrollado ya proyectos con los ayuntamientos de Biar, Vilavella, Orpesa, la Vall D´Uixó y O Barco. Además trabaja para el Villareal CF o el Grupo Formica, principal fabricante y distribuidor mundial de laminados decorativos. Ahora Orienta está en conversaciones con las diputaciones de Valencia y Alicante para ofrecer sus servicios. La propuesta estrella es la sustitución de áreas de alumbrado público por lámparas LED. Jacobo Muñoz explica que su modelo de negocio es realizar una consultoría energética al cliente y ofrecerle un diseño para reducir su factura eléctrica. «Nosotros financiamos las obras y el cliente se compromete a pagarnos un porcentaje del ahorro energético durante el período de años pactado». En pena crisis de ingresos de las Administraciones Públicas, la propuesta puede resultar interesante para corporaciones municipales. «Lo que ofrecemos es una financiación cero para el cliente porque la sustitución de luminarias se paga a través del ahorro tras un estudio previo de las posibilidades de mejorar la eficiencia», añade Muñoz.

¿Y la luz es la misma? No exactamente. El LED ofrece una sensación de menor luminosidad, pero Jacobo Muñoz explica que está estudiado que finalmente para el ojo humano viene a ser lo mismo porque la pupila se ajusta de manera automática. «Hay factores de corrección en el ojo humano», afirma el director general de Orienta Renovables. Otra de las ventajas de los LEDs, según Muñoz, son que no emiten radiaciones infrarrojas o ultravioletas. «Son indeseables en la iluminación de obras de arte, cuadros, mercancías expuesta en tiendas o expositores de alimentación. Además reduce costes de electricidad en lugares donde se utilizan aires acondicionados, ya que al no emitir calor adicional la luminaria, los aparatos logran la temperatura deseada».