La bolsa española subió hoy el 0,46 por ciento y recuperó el nivel de 10.700 puntos en una jornada marcada por el avance de las plazas europeas, las dudas de Wall Street y la debilidad del dólar después de aumentar el paro en Estados Unidos en septiembre.

Así, el índice de referencia del mercado español, el IBEX 35, subió 49 puntos, el 0,46 por ciento, hasta 10.700,20 puntos. Las pérdidas anuales descienden hasta el 10,38 por ciento.

En Europa, con el euro a 1,392 dólares, las principales plazas europeas subieron: París y Fráncfort, el 0,88 por ciento; Londres, el 0,81 por ciento; el índice Euro Stoxx 50, 0,78 por ciento, y Milán, el 0,28 por ciento.

La bolsa española comenzó la jornada con ganancias considerables, del 1,5 por ciento, que le permitían superar momentáneamente el nivel de 10.800 puntos gracias al impulso de la subida del 1,8 por ciento de Wall Street el día anterior. El euro, por la debilidad del dólar, empezaba la sesión por encima de 1,39 dólares.

Sin embargo no podía aferrarse a ese nivel y poco después bajaba hasta 10.750 puntos, nivel sobre el que se mantendría, prácticamente, hasta la publicación de los datos de empleo estadounidenses una hora antes de la apertura del mercado neoyorquino.

Hasta ese momento se conocía que la economía de la zona euro subió el 1 por ciento en el segundo trimestre y que Portugal colocaba deuda por valor de 1.000 millones.

Además, el Fondo Monetario Internacional (FMI) revisaba al alza las previsiones de crecimiento mundial, al tiempo que constataba la debilidad estadounidense, dejaba en el 0,7 por ciento el PIB español en 2011 -este año seguirá en recesión- y alertaba sobre los riesgos de utilizar las divisas como arma de política económica.

Pero estos datos no incidían demasiado en la bolsa, a la que si afectaba el anuncio de Moody's de revisar la nota de la deuda de la banca irlandesa y el recorte por Fitch de la deuda soberana de Irlanda.

La publicación de datos laborales del sector privado estadounidense en septiembre, cuando perdieron su empleo 39.000 trabajadores, recortó las ganancias de la bolsa, que bajó de 10.700 puntos.

La indecisión de Wall Street, afectada por otros datos sobre la desaceleración de la economía estadounidense, como la caída del 0,2 por ciento de las peticiones semanales de hipotecas, reducían las posibilidades de la bolsa española.

Al final de la sesión, con el oro que marcaba otro máximo histórico en 1.346,5 dólares y con el petróleo Brent por encima de 85 dólares, la bolsa conseguía recuperar el nivel de 10.700 puntos, perdido hace dos semanas.

Excepto Iberdrola, que bajó el 0,16 por ciento, el resto de los grandes valores subió: Repsol, el 1,61 por ciento; Telefónica, el 0,27 por ciento; Banco Santander, el 0,25 por ciento, y BBVA, el 0,04 por ciento

OHL comandó las ganancias entre las empresas del IBEX con un alza del 6,82 por ciento, seguida de Técnicas Reunidas, que se revalorizó el 5,73 por ciento gracias a un informe favorable, en tanto que Iberia, que firma hoy su alianza con British Airways y American Airlines, el 3,73 por ciento, y Ferrovial, que vendió parte de una autopista canadiense, el 3,19 por ciento.

Gamesa, que se ha aliado con Northrop para desarrollar molinos de viento marinos, lideró las pérdidas del Ibex con una bajada del 1,22 por ciento, seguida de Banesto, que mañana presenta resultados del primer trimestre y cayó el 1,2 por ciento, en tanto que Gas Natural cedió el 1,05 por ciento.

En el mercado continuo destacó la subida del 7,2 por ciento de Funespaña, mientras que Amper encabezó las pérdidas con una caída del 3,38 por ciento.

Poco antes del cierre del mercado de deuda, la rentabilidad del bono español a diez años bajaba siete centésimas y se situaba en el 3,98 por ciento, mientras que el efectivo negociado en bolsa se situaba en 5.818 millones, de los que cerca de 3.450 millones los intermediaron inversores institucionales.