¿Tendría la Generalitat más dificultades para adjudicar a las grandes cajas valencianas una emisión de pagarés por mil millones como la aprobada por ambas esta semana cuando estén plenamente integradas en los SIP que lideran Caja Madrid, en el caso de Bancaja, y Cajastur, en el de la CAM?. La respuesta, según fuentes financieras consultadas por este diario, es que n0. Pero con un matiz: siempre y cuando, como ha sido en este caso, la operación sea rentable y tenga garantías suficientes. Al respecto, recordaron la emisión que la Comunidad de Madrid ha adjudicado a La Caixa. La gran incógnita que plantean estas fuentes es si, dentro de 18 meses, que es el plazo de amortización, la Generalitat tendrá liquidez para devolver el dinero.

Por otro lado, a la salida de una visita institucional al presidente de la Generalitat por parte de los máximos responsables del SIP de Cajastur y la CAM, el presidente de esta última, Modesto Crespo, no desveló novedad alguna sobre la constitución del grupo y aseguró, respecto a si se está preparando para actuar ante la previsible segunda oleada de fusiones en el sector, que eso "lo dirá el mercado".