El incierto futuro del Banco de Valencia tras la intervención del organismo regulador que gobierna Miguel Ángel Fernández Ordóñez tampoco pasó ayer desapercibido para gran parte de los patronos de la autonomía. Según la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), se trata de una de las "peores noticias financieras" de los últimos años y atribuye la situación de la entidad con sede en Pintor Sorolla a la falta de protección de Bankia, grupo resultante de la fusión entre Bancaja y Caja Madrid y que controla alrededor del 38 % de capital del banco valenciano. También este lobby empresarial que aglutina a un centenar de grandes empresas y directivos reclamaba ayer la necesidad de seguir trabajando para que incremente el peso de Bancaja en Bankia y, por tanto, se defiendan los intereses de la Comunitat Valenciana.

Según el presidente de la federación agroalimentaria y miembro de AVE, Federico Félix, con la intervención de la CAM y ahora del Banco de Valencia aumenta un "fracaso social y económico" de la autonomía. En su opinión, "parece claro que la entidad no estaba haciendo bien las cosas, pero tampoco otros bancos o cajas. No se trata por igual a otras firmas que cuentan con importantes desfases patrimoniales por una valoración de activos que no siempre refleja la realidad".

Olivas, representante de AVE

La dimisión de José Luis Olivas como vicepresidente de Bankia y del Banco Financiero y Ahorro (BFA) también deja en el aire su papel como representante de AVE. El otrora mandatario de la Caja del Mediterráneo (CAM) Modesto Crespo abandonó este lobby empresarial tras ser apartado de la gestión de la entidad de ahorro también intervenida.