El estancamiento del mercado del automóvil desde el pasado mes de agosto en los principales países de la Unión Europea (UE), principal destino del 90 % de la producción de Ford Almussafes, ha provocado la temida noticia entre la plantilla de la factoría valenciana del automóvil: habrá un expediente de regulación de empleo (ERE) temporal entre los meses de febrero y septiembre de 2012.

El anuncio fue comunicado ayer por la dirección de la compañía a las centrales sindicales y hoy ha sido analizado en una comisión consultiva para negociar las condiciones de un ERE que, en principio, se prolongará durante 40 días y afectará a 4.000 personas de las plantas de montaje de vehículos y algunos departamentos administrativos. No afectará a las plantas de motores.

La empresa justifica estos nuevos paros técnicos -no se repetían desde 2009- porque prevé "un año muy flojo de producción" durante 2012 dada la ralentización de ventas en sus grandes mercados: Italia, Francia, Inglaterra y Alemania. A la vista de la situación, la multinacional del óvalo rebaja el volumen de producción un tercio y espera fabricar en 2012 tan sólo 152.000 unidades, frente a los 210.000 del presente año.

En espera del Kuga

El ERE deberá negociarse con el comité de empresa (UGT, Comisiones Obreras, Intersindical Valenciana y CGT) y contar con el visto bueno de la Generalitat para que el INEM pague los salarios de los trabajadores afectados por el expediente. En principio, los paros técnicos serán de jornada completa y es más improbable que Ford opte por realizar paros parciales a los largo de la jornada de producción. En la actualidad realiza 1.065 unidades diarias entre los modelos C-Max y Fiesta, por lo que la aplicación del ERE conllevará el recorte de unos 40.000 coches durante el próximo año.

A partir de junio de 2012 toda la producción del Fiesta, el vehículo histórico con el que la factoría inició su actividad, se fabricará en exclusiva en Colonia para toda Europa. A cambio, y después de las anunciadas inversiones de 800 millones de euros, Almussafes albergará el todoterreno Kuga (a partir de octubre de 2012), así como la furgoneta Transit Connect (2013) y diversas versiones híbridas y eléctricas del C-Max. Sea como fuere, el primer semestre de 2012 tendrá un volumen de producción muy limitado en comparación con otros tiempos. A finales de este año y principio del que viene también ha anunciado la paralización de la actividad durante cuatro semanas -con cargo a vacaciones y jornadas industriales de libre disposición- para realizar obras de adaptación y montaje de los nuevos modelos.

El ERE anunciado también condicionará la carga de trabajo de los proveedores de la compañía, que podrían recurrir a suspensiones temporales de empleo. Por su parte, el presidente de Ford España, José Manuel Machado, afirmó ayer en una jornada del automóvil organizada por el IESE en Barcelona que la crisis "no justifica" la drástica caída de las ventas de coches en España y reclamó al Gobierno que ponga en marcha estímulos para recuperar el mercado doméstico.