El presidente de la Generalita Valenciana, Alberto Fabra, anunció ayer que, en el mes de enero, el Consell aprobará un «ambicioso» plan de apoyo a los emprendedores, microempresas y pymes de la Comunitat Valenciana «para relanzar la actividad económica de aquellos que más pueden generar puestos de trabajo y riqueza».

En este sentido el mandatario valenciano destacó que en los próximos planes sectoriales de incentivos de 2012 se destinarán más de 130 millones de euros para favorecer más de 10.000 proyectos empresariales en la Comunitat valenciana.

Fabra se pronunció así durante la tradicional cena de Navidad de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), celebrada en Castelló, a la que asistieron, además del preesidente valenciano, el alcalde de Castelló, Alfonso Bataller; el presidente de la Diputación, Javier Moliner; varios miembros del Consell y dirigentes empresariales de la Comunitat Valenciana.

Por su parte, el presidente de AVE, Vicente Boluda, mostró el apoyo del colectivo empresarial al jefe del Consell «para que haga lo que tenga que hacer, por doloroso que sea», y le pidió que contribuya al fortalecimiento de la sociedad civil.

El jefe del Ejecutivo valenciano manifestó que España y la Comunitat Valenciana están en una «difícil» situación económica, en la que todos tienen la obligación de «arrimar el hombro», y —dijo— «exige actuar con la máximas responsabilidad».

«A la caída de ingresos en la Administración, se ha unido una deficiente financiación autonómica con graves problemas de liquidez, que provocan retrasos en los pagos, perjudicando notablemente a los proveedores», reconoció Alberto Fabra, quien añadió: «pagar a quien trabaja para nosotros no sólo es una obligación, sino es una prioridad para el Consell y haremos lo necesario para cumplir cuanto antes con esta obligación».

Al tiempo, destacó que la Generalitat «sigue apretándose el cinturón» y que el presupuesto ha incrementado aquellas cuestiones destinadas a políticas sociales, pero supone una rebaja del 6,5 %.