Accede a la presidencia de Fuvama en un momento de grave crisis en el campo por la pérdida de rentabilidad de cultivos, caída de precios y abandono de tierras. ¿Cómo puede contribuir su fundación a mejorar la situación del campo?

La actividad agraria, más allá de la mera producción de alimentos, contribuye a cuidar la calidad medioambiental o mejorar la salud de las personas. En mi opinión, los prioritario es consolidar políticas y ejes de actuación desde las administraciones públicas que contribuyan a valorar este papel de la agricultura en la sociedad, lo que atraería inversiones públicas y privadas. Y ayudará a entender a la agricultura como un sector clave para el desarrollo social. Si hay pérdidas de rentabilidad y abandono de cultivos es también por mala gestión y por problemas estructurales del campo, donde hay que regular y concentrar la oferta.

¿Qué espera de la nueva Política Agraria Común?

Que los cultivos mediterráneos no salgan perjudicados. La citricultura también se la juega por el acuerdo comercial de la UE con Marruecos. En la nueva PAC Bruselas ya ha adelantado que hará una clara apuesta por la agricultura ecológica. Si se apuesta por este sector es porque tiene futuro. También tienen un futuro prometedor los cultivos agroenergéticos, aunque en España existen pocas plantas generadoras de electricidad. Su desarrollo es muy escaso. Pienso que la agricultura intensiva de masas arbóreas, por ejemplo de paulonias, con un crecimiento muy rápido y un bajo coste de producción, pueden ser rentable.

¿Y los biocombustibles?

Con la actual estructura minifundista no puede funcionar. Requiere grandes extensiones de cultivos. En otros países con grandes latifundios de cereales u otros cultivos puede funcionar.

Los agricultores reciben continuos reproches por la posible sobreexplotación de acuíferos o la utilización de fitosanitarios.

Es una etiqueta falsa. El agricultores es el gran cuidador del medio ambiente, aunque existan excepciones. El agricultura hace buen uso del agua. Así lo avala el tribunal centenario de las Aguas. Cualquier abuso se condena. Por el momento, el uso de las energías renovables todavía es escasamente usada por los agricultores por falta de viabilidad. Con todo, sí aumentan en invernaderos o explotaciones ganaderas este tipo de energías. Es bueno recordar, tal como constata un reciente informe del IVIA, que los cítricos tienen una capacidad de asimilar casi dos millones y medio de toneladas de CO2.

Hablando de cítricos. ¿Cómo ve la actual campaña?

La situación de la citricultura no funciona en el campo porque la pérdida de rentabilidad es continua. Los márgenes comerciales están por los suelos. El que tiene poder es la gran distribución. Hay que cumplir las reglas de juego sin cometer abusos..

El Gobierno propone un plan hidrológico nacional. ¿Vuelve la batalla del agua?

El agua hay que hacerla llegar donde haga falta sin discriminaciones y con solidaridad con todas las autonomías. Los agricultores valencianos reclaman también solidaridad de otros ríos.