La asamblea general de Bancaja celebró ayer su asamblea general para aprobar las cuentas anuales de 2011 y el presupuesto de la Obra Social de 2012, un encuentro crispado al que asistieron 158 representantes y que pone fin a su histórica relación financiera con la caja de ahorros valenciana ahora integrada en el Banco Financiero y de Ahorros (BFA). La votación de las cuentas anuales, del informe de gestión y de la aplicación de resultados constató el malestar de un tercio de los consejeros de la asamblea general de Bancaja, quienes votaron en contra y no dudaron en criticar la gestión realizada por el consejo de la entidad valencianas.

El actual presidente de Bancaja, José María Mas Millet, quien sustituyó a José Luis Olivas el pasado 30 de mayo, logró el visto bueno a las cuentas con el respaldo de los consejeros del PP designados por los ayuntamientos y la Generalitat, así como por los de la Asociación de Impositores. Pero no así con los del PSPV o los representantes de las centrales sindicales, muy críticos en sus intervenciones sobre el incierto futuro de la fundación ante el abandono del BFA. Las cuentas anuales contaron con el rechazado de 48 consejeros y 4 abstenciones, mientras que el informe de gestión no fue aprobado por 38 representantes. También el informe anual sobre las remuneraciones tuvo un amplio rechazo (42 personas) y se criticó abiertamente por parte de algún consejero la indemnización que recibirá el director financiero de Bancaja, Aurelio Izquierdo.

Beneficios de 1,4 millones

Más Millet aseguró que la nacionalización de la matriz de Bankia conllevará la transformación de Bancaja de entidad de crédito a fundación de carácter especial, tal como contempla la normativa vigente, adaptando así su estructura a la función exclusivamente social que desarrollará. "Es previsible que, transcurrido el verano, celebremos una nueva asamblea para someter a consideración" la citada transformación. La entidad presenta a cierre de 2011 unos fondos propios de 173 millones de euros, con una cuenta de resultados que arroja un resultado negativo de 557.000 euros, en el que se incluye un crédito fiscal de 216.000 euros recuperable a partir del año 2025 y que, por razones de prudencia, el consejo de administración estimó oportuno provisionar. Mas Millet trasladó a los consejeros que la previsión para el cierre del primer semestre de 2012 apunta a un beneficio aproximado de 1,4 millones, mientras que se estima un beneficio antes de impuestos superior a dos millones de euros para la totalidad del ejercicio.

Presupuesto de 2012

La asamblea general aprobó el presupuesto de la Obra Social de Bancaja en 2012, que asciende a 28,3 millones de euros. Con el objetivo de mantener el arraigo y repercusión social en su territorio natural, la Obra Social de Bancaja desarrollará toda su actividad en el ámbito de la Comunitat Valenciana, priorizando aquellas actuaciones que atiendan de forma más eficaz las demandas y carencias de la sociedad valenciana. En 2011 concedió 2.200 becas a universitarios.

Mas Millet también repasó los hechos ocurridos en Bancaja durante este año y analizó la repercusión del proceso iniciado por BFA y Bankia, de la que forma parte, respecto a la conversión en acciones de los 4.465 millones de participaciones preferentes que fueron emitidas por BFA en diciembre de 2010 y suscritas por el FROB. También hubo una aportación adicional de 19.000 millones al capital.

Críticas a Izquierdo y pago de preferentes

Los representantes sindicales criticaron con contundencia las indemnizaciones garantizadas a Aurelio Izquierdo, quien cobrará 7,63 millones de euros cuando se jubile como director financiero de Bancaja. Algunos representantes llegaron a pedir la dimisión del consejo de administración de la entidad. También hubo intervenciones para exigir explicaciones al presidente sobre el incierto futuro de la entidad tras la salida del BFA, ya que habrá que definir una nueva estructura, órganos de gobierno y líneas de actuación para los próximos años. Incluso otro nombre. La fundación podría buscar inversores o mecenas para garantizar su futuro a largo plazo. Algunos miembros de la asamblea general también exigieron que Bancaja garantice el futuro de las acciones preferentes en igualdad de condiciones que los titulares de Caja Madrid. A la asamblea de Bancaja acudieron los consejeros del BFA Rafael Ferrando y Ángel Villanueva, secretario de Bancaja. No acudió Antonio Tirado. j. l. z. valencia