Un día después de que Rodrigo Rato dimitiera como presidente de Bankia y una jornada antes de que el consejo de la entidad elija a su sucesor, José Ignacio Goirigolzarri, el banco participado por Bancaja decidió que su representante en Iberdrola, donde tiene en torno al 5 %, sea su vicepresidente, Francisco Pons, en sustitución de José Luis Olivas, todavía máximo dirigente de la caja de ahorros valenciana. Ayer se reunió el consejo de Iberdrola y acordó proponer, entre otros, este nombramiento a la junta de accionistas convocada para el 22 de junio.

La cuestión es que el pasado 24 de abril el consejo de la eléctrica acordó el nombramiento como consejero de Ángel Acebes, quien deja para ello su vocalía en la matriz de Bankia, pero no tomó ninguna decisión que afectara a Olivas, con lo que dio a entender que seguiría en la entidad. Lo cierto es que el presidente de Bancaja temía que, en el algo más de un mes que falta para la junta, los nuevos responsables de Bankia decidieran retirarle su confianza en Iberdrola, que era el refugio que se había reservado -la remuneración anual puede alcanzar los 400.000 euros- para cuando se consumara su salida de Bancaja, el último reducto de poder que le queda ya después de dimitir en noviembre como presidente del intervenido Banco de Valencia y, después, como vicepresidente de BFA/Bankia, donde le sustituyó Pons, la persona con más papeletas para sucederle en la caja.

La marcha de Olivas de Iberdrola, donde está desde 2004 y donde seguirá su antecesor en la caja, Julio de Miguel -a quien se le buscó esa salida cuando el expresidente de la Generalitat impuso su candidatura hace ocho años-, tiene difícil interpretación. Cabría pensar que es el último golpe de Rato, pero en vista de que el lunes Olivas no tenía noticia de su relevo en Iberdrola también podría ser el primer puñetazo sobre la mesa del futuro presidente. La principal incógnita a despejar ahora es si la caída de Olivas anticipa una inminente salida suya de la caja. Vista su trayectoria, no sería de extrañar que pretendiera enrocarse y mantener esa parcela de poder, en realidad ya solo concentrada en la obra social, pero todo indica que, tras la dimisión de Rato, pocos argumentos le quedan para seguir en el grupo, sobre todo después de perder la lucrativa plaza en Iberdrola. Por contra, Pons estaría ejerciendo con este relevo su papel como vicepresidente para las participadas, a no ser que ya se le esté buscando un refugio como en su día le pasó a De Miguel y sea un anticipo de una renovación salvaje en el consejo de Bankia.

La patronal pedirá a Fabra que influya en el consejo

Los empresarios valencianos no pretenden aprovechar los más que probables cambios en los consejos de Bankia/BFA para colocar a representantes patronales. Sin embargo, fuentes empresariales admitieron que la patronal autonómica Cierval sí trasladará al presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, la necesidad de que influya para "sanear" esos consejos, actualmente integrados por muchos expolíticos y algunos empresarios vinculados al ladrillo. Estas fuentes añadieron que el Consell debe "defender una cuota valenciana, buscando personas con conocimiento de la materia, independientes y con capacidad de dar un puñetazo sobre la mesa si es necesario".

Por otro lado, el presidente de Cierval, José Vicente González, aseguró ayer en un comunicado que espera que el nuevo equipo gestor de Bankia "muestre una mayor implicación" con la Comunitat Valenciana y "posibilite un acercamiento de los centros de decisión" a esta autonomía, que concentra cerca del 25 % del negocio del banco. En su opinión, la "actuación" de esta entidad financiera con la Comunitat Valenciana debe "mejorar, porque no ha sido todo lo buena que debería". Cierval espera que el nuevo equipo directivo de Bankia "esté compuesto por los mejores profesionales evitando criterios subjetivos o territoriales", cuestionando los anteriores gestores. Además, los empresarios confían en que la inyección del Estado a Bankia "pueda mejorar el flujo de crédito hacia las empresas más necesitadas de liquidez" de esta autonomía.