La prima de riesgo española -que mide el diferencial entre la rentabilidad del bono alemán y el español a diez años- ha bajado hoy hasta 536 puntos básicos mientras espera la decisiva jornada de mañana, que incluye subasta del Tesoro y reunión del Banco Central Europeo (BCE).

En su vigésima jornada por encima de 500 puntos básicos, el riesgo país se ha reducido en 10 unidades, al tiempo que la rentabilidad del bono a diez años se relajaba hasta el 6,73 %, desde el 6,75 % de la víspera.

La esperanza de que el BCE aprobará mañana medidas contundentes para preservar el euro ha permitido reducir la prima de riesgo 75 puntos básicos en una semana, aunque esta tendencia se ha ralentizado desde ayer debido a las reticencias mostradas por el Gobierno alemán hacia algunos de los instrumentos propuestos.

En concreto, el ministro de Economía, Philipp Rösler, ha reiterado hoy la frontal negativa de Berlín a dar licencia bancaria para el fondo permanente de rescate, al tiempo que el Bundesbank se mostraba contrario a aumentar las competencias del BCE.

Estas declaraciones han desinflado la euforia desatada el pasado jueves cuando el presidente del BCE, Mario Draghi, dijo que haría "todo lo necesario" para preservar la moneda única, unas palabras que el mercado espera que materialice ahora en hechos.

En cualquier caso, la expectación ante la reunión de mañana es máxima y, según apuntan los expertos, el mercado ya ha descontado en buena medida una compra masiva de deuda soberana que, de no producirse, provocaría una profunda decepción.

Otra de las grandes citas de la jornada de mañana es la decisiva subasta que celebra el Tesoro Público, la primera tras el apoyo de Draghi, en la que España espera captar hasta 3.000 millones de euros.

El Tesoro subastará tres emisiones nuevas, una de bonos con vencimiento en 2016 y dos de obligaciones a 2014 y 2022, que según el departamento de análisis de Bankinter serán determinantes "para decidir si podemos seguir financiándonos por nosotros mismos".

Informe de S&P

Un elemento de ayuda con el que contará mañana el Tesoro es el informe publicado hoy por la agencia de medición de riesgos Standard & Poor's, con el que confirma la calificación de la deuda española a largo plazo en BBB+, un "aprobado alto", debido al "firme compromiso con el ajuste económico y fiscal".

Los analistas consultados por Efe califican esta noticia de "positiva", aunque advierten que no implica un cambio de tendencia y que el BCE ofrecerá una cierta ayuda, pero no la solución definitiva a los problemas del país.

Con el euro en 1,23 dólares, el bono alemán a diez años, que es el que sirve de referencia, cotizaba hoy al 1,37 % de interés, por encima del 1,29 % de ayer.

La prima de riesgo italiana bajaba hasta 456 puntos básicos (24 menos que ayer); la irlandesa, hasta 470 puntos (10 menos), y la portuguesa, hasta 970 puntos (21 menos).

El riesgo país griego subía hasta 2.480 puntos básicos (63 más).

Los seguros de impago de deuda ("credit default swap" o CDS), relativos a los bonos a diez años de España para cubrir la posibilidad de impago de 10 millones de dólares se cambiaban al cierre de la sesión de hoy a 480.810 dólares anuales, lo que los coloca como los sextos más caros del mundo.