La economía española creció el 0,4 % el pasado año, tres décimas menos de lo estimado en un principio por el Instituto Nacional de Estadística (INE), según la actualización publicada hoy por este organismo.

Asimismo, el INE ha aumentado dos décimas la caída de la economía española en 2010 y la ha situado en el 0,3 %.

En cambio, mantiene el descenso del 3,7 % del PIB en 2009 y el crecimiento del 0,9 % en 2008.

El INE explica que la rebaja de tres décimas en 2011 se debe a la menor aportación de la demanda externa (pasa de 2,5 a 2,3 puntos) y a una contribución más negativa al crecimiento agregado de la demanda nacional (de -1,7 a -1,9).

La demanda exterior se ha modificado por la inclusión en la actualización de los datos definitivos del comercio exterior de bienes de 2010 y de las nuevas estimaciones de la balanza de pagos de 2010 y 2011.

El crecimiento real de las exportaciones el pasado año se ha rebajado en 1,4 puntos (del 9 al 7,6 %), mientras que la caída de las importaciones se ha aumentado en ocho décimas (del 0,1 al 0,9 %).

Debido a ello, la aportación de la demanda externa al crecimiento del PIB se ha reducido dos décimas.

En cuanto a la demanda nacional, el decrecimiento del gasto en consumo final se ha aumentado una décima (del 0,7 al 0,8 %) y la caída de la formación bruta de capital fijo ha pasado del 5,1 al 5,5 %.

Con la revisión de estos datos, la aportación al crecimiento agregado de la demanda nacional ha disminuido en dos décimas.

La reducción del gasto en consumo de los hogares en 2011 fue del 1 % y no del 0,1 %, mientras que el decrecimiento del gasto de las administraciones públicas fue del 0,5 %, frente al 2,2 % previsto.

El INE indica que la rebaja de la inversión se ha debido a la bajada en los activos de construcción (9 % en lugar del 8,1 %), frente a la revisión al alza en bienes de equipo y activos cultivados (del 1,4 al 2,3 %) y en los activos fijos inmateriales (del 0 al 3,1 %).

Asimismo, el descenso del empleo total de la economía, medido en términos de puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo, ha pasado del 2 al 1,7 %, así que la productividad aparente del factor trabajo ha reducido su crecimiento en seis décimas, hasta el 2,2 %.

En términos nominales, el decrecimiento del PIB de 2011 se ha estimado en el 1,4 %, alcanzando 1.063.355 millones de euros.