Los representantes de Ribera Salud, sus socios Bankia y Banco de Sabadell y la aseguradora Sanitas cerraron ayer en Madrid la venta del 60 % que la concesionaria tenía en la firma gestora del hospital público de Torrejón de Ardoz y el 40 % del de Manises. La operación se selló con un desembolso por parte de Sanitas de 77,6 millones de euros que los accionistas destinarán en gran parte (60 %) a reducir la deuda que Ribera Salud tenía con ellos y a fortalecer la solvencia financiera de la empresa, a la que la Generalitat adeuda cerca de 100 millones de euros.

El director general de Sanitas Hospitales, Iñaki Peralta, aseguró ayer que la compra cierra el capítulo de las negociaciones con bankia y Sabadell y descartó la posibilidad de entrar en el capital de Ribera Salud y hacerse también con su gestión, tal como se había especulado estos días. La aseguradora ha desembolsado 29 millones de euros por el hospital de Manises y 48,6 millones por el de Torrejón.

Las dos compras deben ser autorizadas por las autoridades autonómicas. En el caso valenciano, fuentes de la Generalitat dijeron que no pondrán impedimentos siempre que se respete el el modelo de colaboración y la calidad de la atención sanitaria.

Sanitas ya controlaba el 60 % del centro valenciano por lo que ahora se quedará con la totalidad del mismo en una estrategia de crecimiento y apuesta por la colaboración público-privada en materia sanitaria, según explicó Peralta. El hospital de Manises arrastra una deuda cercana a los 40 millones por el retraso en los pagos de la Generalitat que ahora asumirá Sanitas, que negocia con la conselleria de Sanidad que dirige Luis Rosado (en concreto con el director general económico Francisco Soriano) fórmulas para canalizar los pagos.

Sanitas quiere posicionarse en el mercado valenciano y no descarta participar en los procesos de privatización de la gestión sanitaria pública que planea la Generalitat, pendientes de sacar adelante por las dudas jurídicas que plantea. La privatización del hospital de Llíria podría ser una de las opciones que entrarían en el modelo desplegado por Sanitas en Manises. La aseguradora también podría tratar de optimizar el hospital de Manises solicitando a Sanidad autorización para destinar una de las plantas a sus propios asegurados. El departamento de salud que ya gestionaba Sanitas en colaboración con Ribera Salud incluye, además del hospital, 22 centros de atención primaria de 14 poblaciones y el hospital de larga estancia de Mislata.

En Madrid, la compañía del británico Grupo Bupa también aspira a participar en los concursos para la cesión de la gestión de seis hospitales públicos anunciada por el Gobierno regional. En el hospital de Torrejón compartirá accionariado con Asisa (25 %), Concessia (10 %) y FCC (5 %).

La operación de venta cierra un capítulo del culebrón de Ribera Salud, en venta desde hace más de un año. Fuentes conocedoras del proceso explican que la desinversión permite a Bankia aflojarse la presión del Banco de España y las autoridades europeas, que la obligan a ir desprendiéndose de sus participaciones empresariales. Ahora se abre un período de calma en el que la entidad que preside José Ignacio Goirigolzarri podrá negociar la venta de su paquete del 50 % al Banco de Sabadell. La entidad que preside Josep Oliu pretendía quedarse con todos los activos y ahora estudiará la posibilidad de seguir adelante en su idea de quedarse con una Ribera Salud más pequeña. La desinversión de Manises y Torrevieja era una condición impuesta por Bankia.

Fuentes financiera explicaban ayer que las ventas suponen "un paso atrás para mirar hacia delante". El director general del grupo Ribera Salud, Alberto de Rosa, aseguró a través de un comunicado que ahora "comienza una nueva etapa, con nuevos retos y oportunidades en el modelo de colaboración público privada que hemos desarrollado desde hace 14 años, y además el grupo fortalece su presencia en los proyectos en los que participa".

Movimientos a medio plazo

No obstante, la encomienda que Bankia tiene de desinvertir en participaciones empresariales mientras reciba ayudas públicas implica que a medio plazo se producirán nuevos movimientos. La experiencia acumulada señala que no se descarta ninguna opción, desde que se siga troceando la compañía (que tiene participaciones en los hospitales de Alzira, Torrevieja, Elx, Dènia y en la concesionaria de resonancias magnéticas Erescanner Salud y la plataforma de compras b2b Salud) hasta que Sabadell se la queda entera o, junto a Bankia, se traspase a nuevos accionistas.