Los veinte controladores aéreos de la torre del aeropuerto de Manises han decidido solicitar su traslado a AENA al no haberse subrogado sus contratos al nuevo operador privado que se hará cargo del servicio, Ferronats Air Traffic Service, que se llevó la privatización de los servicios de control de 13 aeropuertos -el Altet entre ellos- por 18,1 millones de euros.

A partir del momento en el que se haga cargo del control aéreo el consorcio formado por Ferrovial y Nats, que será probablemente a principios del verano, los veinte controladores de AENA, al no quererse reintegrar en el nuevo proveedor, serán asignados a otros destinos, tal y como se acordó cuando se decidió privatizar el servicio. El rechazo a la integración se produce, entre otras causas, por las diferencias salariales, ya que los que van a entrar nuevos tendrán un sueldo bruto anual de alrededor de 31.000 euros, prácticamente una tercera parte de lo que cobran.

Según el sindicato de controladores aéreos, USCA, la situación que se ha producido en el aeropuerto de Manises se ha repetido en la mayoría de las instalaciones en las que se ha incorporado el nuevo operador privado. "Son condiciones inasumibles", señaló un portavoz del sindicato a Levante-EMV, ninguno de los controladores actuales se va a quedar".

Por otra parte, el nuevo personal ya se encuentra en las instalaciones en el periodo de instrucción, que se inició el pasado mes de octubre, a cargo del actual personal dependiente de AENA. En Manises, los 20 controladores actuales serán sustituidos por 17 de Ferronats. Se trata de personal que se ha formado en escuelas privadas surgidas a raiz del cambio de la legislación, que realizan un curso de formación de alrededor de veinte semanas de formación específica de control de aeródromos, frente a los que se hacían anteriormente en el centro adscrito a la Sociedad Estatal de Enseñanzas Aeronáuticas Civiles (Senasa), de entre 15 y 20 meses de duración, según señalaron fuentes de USCA.

El nuevo personal que se encuentra ya en el aeropuerto de Manises, entre los que hay algún controlador militar, deberán realizar la formación práctica en grupos de 5 o 6 y posteriormente serán evaluados por el personal de AENA que aún continúa prestando sus servicios en la torre.

El cambio de controladores se deberá hacer de un día para otro, probablemente antes de empezar la campaña de verano, por un problema de las pólizas de seguros. Es decir, que tras tomar el control de la torre el personal de Ferronats, no quedará ningún controlador de los que habían prestado sus servicios con anterioridad.

Esta transición de los controladores ha sido calificada por el sindicato USCA de "precipitada". "Ya hemos expresado nuestro sentir a todas las autoridades, porque se trata de un cambio sin precedentes. Nunca se ha dado la situación de que de un día para otro entre una plantilla nueva. Siempres ha coexistido el personal nuevo con gente con una experiencia de 15 o 20 años, que se hacía cargo de la situaciones de emergencia que pudieran ocurrir".