El presidente de Mercadona, Juan Roig, aprovechó ayer la presentación de los resultados de la cadena de supermercados logrados en 2012 para analizar su particular visión de la crisis económica de España y asegurar que 2013 "será un año duro y muy difícil". Destacó, sin ambages aunque sin referirse a ningún caso en concreto, que "la corrupción lastra la vida económica y la productividad del país" y que "nuestro nivel de vida va a depender de la productividad". El máximo responsable de la firma líder en el sector, que concluye un ejercicio con récord histórico en la cifra de ventas al lograr 19.077 millones de euros (+7 %) y de beneficios netos, con 508 millones (+7 %), augura una situación complicada durante este ejercicio tras la subida generalizada de los impuestos y la necesidad de emprender reformas estructurales.

Más prudente en sus valoraciones respecto a otros años, Roig reconoció que los excelentes resultados logrados por la compañía durante el último ejercicio tienen que ver con la corrección de "errores" y la apuesta por "compartir el crecimiento con hechos". En su opinión, en Mercadona "nos gastamos el dinero que tenemos en los bolsillos, que sale del nivel de productividad, ya que a mayor productividad, más fondos y mayor rapidez para emprender la salida de la crisis".

No aventuró que "ya estamos saliendo", tal como ha afirmado esta semana el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro y abogó por "cortar con el despilfarro" porque España se "ha pasado" gastando dinero.

A pesar de todo afirmó no ser "pesimista" en el futuro a largo plazo, si bien lamentó los niveles de paro y absentismo laboral existentes en España en un momento en que ha subido el IRPF y los ciudadanos tienen "menos dinero disponible". Respecto a la última subida del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA), el empresario valenciano pronosticó que a todos los españoles se les "ha pegado un golpe" con esta medida y que Mercadona ha absorbido 25 millones de euros mensuales para no trasladarla a los clientes.

En ese sentido, la cadena de supermercados tiene previsto seguir trabajando para que el carro de la compra sea "más barato", sin bajar la calidad, porque "la renta de los españoles bajó en 2012 y bajará en 2013 y 2014". El presidente de la empresa valenciana también reconoció que "en Mercadona nos pasa lo mismo y la única solución es reinventarnos" continuamente para afrontar la recesión.

Impuestos y sector público

Roig apuntó que si "hablo mucho" recibe "demasiados palos; más que un alfombra", si bien no tuvo reparos en reconocer que "si el sector público necesita más dinero subirá más los impuestos". En ese sentido comentó que "o se reforma el sector público o continuarán creciendo los impuestos porque las administraciones necesitan igualar ingresos y gastos. Nos guste o no, ya que esto es una ley universal".