Los casi 3.000 camiones de gran tonelaje que circulaban habitualmente por la N-II en dirección hacia La Jonquera, de los que un millar proceden de la Comunitat Valenciana, constataron ayer la restricción al transporte de mercancías que acaba de imponer el Servei Catalá de Trànsit y la obligatoriedad de usar la autovía de peaje AP-7, lo que supone un coste adicional de uno 40 euros por viaje de ida y vuelta a los camioneros que usan este trayecto. Fuentes de la patronal Fenadismer confirmaron que desde este fin de semana impondrá multas de 500 euros a camiones que transiten por algún tramo de la citada carretera nacional, aunque algunos chóferes ignoran la entrada en vigor de la mencionada restricción al tráfico.

Transportes Arnedo, empresa con una de las principales flotas de vehículos frigoríficos para la exportación de productos hortofrutícolas de la Comunitat Valenciana, denunció ayer en declaraciones a Levante-EMV las graves consecuencias que tendrá la prohibición del uso de N-II entre Girona y La Jonquera (unos 90 kilómetros). Según Juan José Arnedo, uno de los directivos de la firma valenciana, la Generalitat de Cataluña "perjudica gravemente al sector" y sostiene que, a pesar de las bonificaciones aplicadas a los camiones en los peajes, el aumento de los costes (unos 15 céntimos de euros por kilómetro) resulta difícil de asumir "en un momento de grave crisis y de caída de la actividad".

La imposición de este peaje obligatorio afecta de lleno al sector del transporte de frutas y hortalizas, según reconocen fuentes de la Federación Valenciana de Empresarios Transportistas (Fvet). La medida, que impide el tráfico de camiones por la N-II a su paso por Girona para frenar la alta siniestralidad de esta vía, supone "un grave perjuicio para el sector", según Fenadismer, convocante de una jornada de movilización junto a los peajes de AP-7 de la Jonquera. Los transportistas piden a Acesa (grupo Abertis) la gratuidad por el uso del tramo de autopista, ya que consideran insuficiente la bonificación de entre un 35% y un 50%.

Abertis niega que reporte un beneficio

Ante las acusaciones que Abertis ha recibido de las organizaciones de transportistas de ser la principal beneficiaria de la aplicación de esta medida de tráfico, la concesionaria de autopistas asegura que la bonificación se aplicará a todos los camiones. Hasta ahora, según datos de Abertis, además de los casi 3.000 vehículos que deberán utilizarán a partir de ahora este tramo de la AP-7, ya había 5.000 camiones que utilizaban sus servicios y que a partir de ahora también tendrán descuentos.

Por su parte, el conseller de Territorio y Sostenibilidad, Santi Vila, aseguró que en las primeras doce horas de implantación de la restricción de circulación de los camiones de cuatro ejes o más por la N-II a su paso por Girona se han desviado un total de 1.790 camiones hacia la AP-7. La concesionaria Abertis aseguró que durante estas primeras doce horas de prohibición han pasado por la autopista 4.990 vehículos, frente a los 3.200 de hace una semana. Así, ayer circularon 1.596 camiones más por el tramo de Maçanet de la Selva a La Jonquera -es decir, sin salir de la autopista-, mientras que 194 han realizado movimientos internos; la previsión es que diariamente unos 2.850 camiones dejen de circular por la N-II. Los agentes de tráfico están llevando a cabo tareas de divulgación entre los camioneros durante los últimos días. Pese a todo, la norma que entró ayer en vigor permite imponer la multa a los camiones desde el mismo momento de su aplicación. levante-emv valencia