El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha explicado hoy que la banca tendrá que dotar como máximo unos 10.000 millones en dos ejercicios para cubrir las nuevas provisiones por créditos refinanciados y eso supondrá unas necesidades adicionales de capital de unos 2.000 millones.

Un déficit para el que no será necesario apelar a nuevas ayudas públicas, ya que De Guindos destaca en estos momentos que el Gobierno no ha identificado necesidades de capital de ninguna entidad, ya que la realidad está siendo menos mala que la prevista en las pruebas de estrés que sirvieron para recapitalizar al sector.

Además, para alejar el fantasma de que la banca pueda requerir más fondos europeos, el ministro ha recordado que el FROB, el mecanismo español para rescatar al sector, tiene "mucha liquidez", unos 10.000 millones, y el Tesoro cuenta con acceso a los mercados.

Es decir, una situación totalmente distinta a la de hace un año, según ha expuesto durante su intervención en un curso organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica y la Universidad Internacional Menéndez Pelayo.

Al margen del mejor acceso de España a los mercados, De Guindos ha subrayado que en estos momentos, la transparencia de la banca española "no tiene ningún tipo de parangón" y existen muchísimas menos dudas e incertidumbres que hace "12, 14 ó 15 meses".

Y todo ello después de que en 2012 el Gobierno exigiera a las entidades que sanearan su riesgo inmobiliario, lo que llevó al sector a atesorar en provisiones unos 36.000 millones de euros, "un esfuerzo brutal desde el punto de vista de la banca".

Eso ha permitido que no existan dudas de que los activos tóxicos inmobiliarios están correctamente provisionados, al mismo tiempo que la exposición excesiva al crédito promotor se ha corregido.

No obstante, el ministro ha admitido que las dudas pueden surgir por la situación económica, algo que no afecta únicamente a la banca española, y por ello la salida de la recesión "sería también buena para el sistema bancario español", ha recalcado.

Aún así, y como consecuencia de las refinanciaciones que llevan a cabo las entidades especialmente en la crisis preocupan a los mercados, el Banco de España exigirá un nuevo esfuerzo de provisiones al sector.

"Somos el único país en el que se publican las refinanciaciones que está realizando el sistema bancario", ha añadido De Guindos, que ha explicado que el sector deberá provisionar unos 10.000 millones y eso tendrá unas necesidades de capital en torno a 2.000 millones.

Por todo ello, preguntado por la posibilidad de que el Gobierno utilice la parte del crédito europeo concedido a la banca que resta (60.000 millones), De Guindos ha insistido en que no se han identificado necesidades adicionales de capital de ninguna entidad en este momento.

Ha recalcado que la situación económica del país es "completamente distinta" a la de hace un año, cuando se inyectaron 40.000 millones, ya que el FROB "tiene mucha liquidez", en torno a 10.000 millones y por otro lado el Gobierno disfruta de acceso a los mercados.

Ha recordado que Oliver Wyman determinó unas necesidades de capital y la realidad está siendo "menos mala" de lo que indicaba ese escenario estresado.