Unión Gremial inicia el camino para su regreso a la CEV al cabo de veinte años

Veinte años después de abandonar la Confederación Empresarial Valenciana (CEV) en una escisión traumática que arrastró a otras asociaciones de pymes y luego dio lugar al fracasado proyecto de L'Empresarial, la centenaria organización de comerciantes Unión Gremial acaba de iniciar el camino para su regreso a la patronal provincial. El presidente de la entidad, Francesc Ferrer, aseguró ayer que tanto el comité ejecutivo de Unión Gremial como el de la CEV han aprobado el inicio de conversaciones entre las dos partes con el propósito de estrechar la colaboración y buscar sinergias. Ferrer afirmó que "el objetivo no es la integración, pero, si debe acabar ahí, así será". Otras fuentes empresariales dan por hecho que las conversaciones no tienen otro fin, pero alertan de que el resultado dependerá de las condiciones que pongan las partes.

Unión Gremial atraviesa una situación económica muy difícil, entre otros motivos por los impagos del Consell. La reciente fusión de Cepymev en la CEV es, según Ferrer, un acicate para esas negociaciones porque implica "una apuesta por la defensa del pequeño empresario". Lo cierto es que la autonómica de comerciantes Covaco acaba de abrir un expediene de expulsión sobre Unión Gremial por diversas diferencias internas, y que esta última tiene en venta desde hace año y medio su sede, que comparte con los autónomos de ATA. La vuelta a la CEV se convertiría en una fórmula de supervivencia, dado que esta le daría amparo técnico y cobijo.