El primer ministro heleno, Andonis Samarás, se manifestó este sábado confiado de que 2014 será el año de la recuperación económica de Grecia, y aseguró que su país no necesita más nuevas medidas de ajuste.

En el discurso tradicional de apertura de la feria internacional de la industria en Salónica (norte del país), que el Gobierno de turno utiliza anualmente como plataforma para hacer un balance de gestión, Samarás anunció que una vez logrado el superávit primario este año, el ejecutivo empezará a aliviar los bolsillos de los más necesitados.

El líder conservador aseguró que el 70 % del superávit primario (que excluye el pago de los intereses de la deuda) se destinará o bien a mejorar las pensiones más bajas, o a elevar los salarios de los uniformados o a reducir el precio del fuel calefactor, dependiendo de cuál sea el margen financiero.

Insistió también en que si efectivamente Grecia logra un superávit este año, como esta previsto, habrá cumplido con sus obligaciones frente a la troika de acreedores (Comisión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional), lo que, a su vez, posibilitará que los prestamistas cumplan con sus compromisos, es decir, aprobar medidas encaminadas a aliviar la deuda helena.

Según los datos publicados esta semana por el ministerio de Finanzas, en los primeros siete meses del presente año el superávit primario fue de 2.600 millones de euros, en comparación con 325 millones en el mismo periodo de 2012.

Samarás basó su optimismo en estas cifras como también en los últimos datos sobre el crecimiento económico en el segundo trimestre, publicados ayer mismo, según los que el producto interior bruto heleno se contrajo en el segundo parcial mucho menos de lo pronosticado.

Así, el PIB en el segundo trimestre se redujo un 3,8 % en lugar del 4,6 % previsto inicialmente, algo que, según el primer ministro, demuestra que la recesión se está desacelerando.

A ello se suma, dijo, que hay primeros indicios de que el desempleo -actualmente en torno al 28 %- está aumentando a un ritmo menor.

El primer ministro evitó entrar en detalles sobre la próxima visita de la troika a partir de mediados de este mes, durante la que los expertos harán una nueva evaluación del cumplimiento del programa de ajuste impuesto por los acreedores a cambio del rescate financiero.

Pese al tono optimista de Samarás, son todavía muchas las asignaturas pendientes desde la óptica de la troika, como por ejemplo el escaso progreso en el programa de privatizaciones, o problemas en la reforma de la Administración y de la Sanidad públicas.

La troika deberá hacer además este otoño un balance sobre la sostenibilidad de la deuda pública de Grecia, que ha seguido aumentando, en buena medida a causa de la espiral de recesión y que, según datos de la Comisión Europea, alcanzará este año el 175,7 % del PIB.

Para esta tarde, los principales sindicatos de este país han convocado varias manifestaciones en el centro de Salónica, en protesta contra la política de austeridad del Gobierno.