Representantes del Consejo, del Parlamento y de la Comisión Europea llegaron en la madrugada de ayer a un principio de acuerdo político que cierra definitivamente la reforma de la Política Agrícola Común (PAC). El nuevo programa -que estará vigente entre los años 2014 y 2020 y requiere ahora el voto favorable del pleno europarlamentario- no recoge finalmente las peticiones que reclama el campo valenciano en referencia a la defensa de la agricultura mediterránea, ya que deja fuera de las ayudas directas al viñedo, frutales y hortalizas, lo que representa un tercio de los cultivos de la Comunitat Valenciana.

Fuentes de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja) denuncian que la nueva PAC "no responde a las necesidades del campo valenciano, ni cumple las espectativas creadas a lo largo de este año al perpetuar la marginación a la agricultura mediterránea". En ese sentido, denuncia que se mantendrán "agravios comparativos" en el sistema de reparto de ayudas, en el que los productores y ganaderos valencianos perciben una rentas un 72 % inferiores a la media del sector en España. Las ayudas medias aprobadas para los beneficiaros de Valencia, durante 2012, se elevaron a 1.692 euros anuales, frente a los 1.754 euros de Castelló y 2.122 euros, de Alicante. La organización que lidera Cristóbal Aguado lamenta que el 30 % de los cultivos se queden sin subvenciones.

La estructura minifundista también perjudica los intereses del sector en la autonomía. Así, las ayudas de Bruselas canalizadas través del Gobierno de España dejarán de abonarse si son inferiores a 300 euros (hasta ahora el mínimo eran 100 euros).

Para el secretario general de la Unió de Llauradors, Ramón Mampel, el texto que acaba de aprobarse en Bruselas hace difícil que "los agricultores valencianos puedan sentirse contentos con la estrategia de la UE en el reparto de fondos porque no garantiza la solidaridad entre las comarcas agronómicas de toda España". En ese sentido, la Unió lamenta que no garantice las mismas ayudas en todas las autonomías. Respecto a las ayudas para desarrollo rural, Mampel también lamenta que la Comunitat Valenciana siga con menos porcentaje de cofinanciación que otras regiones españolas. Y advierte de los retrasos de los pagos del Consell.