La Guardia Civil ha trasladado en un furgón a los exdirectivos de la extinta Caja Mediterráneo (CAM) detenidos ayer por orden del juez de la Audiencia Nacional Javier Gómez Bermúdez por realizar cinco operaciones supuestamente irregulares con Valfensal, una de las participadas de la caja.

Los arrestados, entre ellos el ex director general de CAM Roberto López Abad, han pasado la noche en dependencias de la Comandancia de la Guardia Civil de Alicante hasta su traslado a la capital de España poco antes de las 8 horas, a bordo de una furgoneta del instituto armado.

López Abad, el exresponsable de proyectos inmobiliarios de CAM Daniel Gil Mallebrera y el exdirector de la división internacional y negocio hotelero de la caja Cesar Veliz, además de dos personas más, deberán prestar declaración a lo largo de la mañana ante Gómez Bermúdez.

Las detenciones se han producido después de que ayer la Guardia Civil registrara, también por orden del citado magistrado, un despacho de abogados en Valencia, uno en Alicante y una oficina mercantil en Mallorca.

López Abad y Gil fueron imputados a raíz de una querella presentada por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), que también se dirigía contra los empresarios Juan Vicente Ferri y José Salvador Baldó.

Según la querella, los imputados obtuvieron "un lucro personal" utilizando la compraventa de tres hoteles y la adquisición de dos parcelas en República Dominicana y México como "pantalla" para una "transferencia de fondos no justificada" desde CAM hacia Valfensal.

Esta sociedad está participada en un 70 % por dos empresarios alicantinos muy vinculados a López Abad y en un 30 % por la filial de la caja Tenedora de Inversiones y Participaciones (TI), que fue usada por el ex director general y Daniel Gil como "una zona opaca de gestión al margen de los mecanismos habituales de CAM".