Los deseos de la conselleria de Economía de tener cerrado antes de final de año el proceso de fusiones en la red de institutos tecnológicos van camino de verse frustrados. Solo dos de los centros, el del metal (Aimme) y el del plástico (Aimplas), han presentado al departamento que dirige Máximo Buch un proyecto de integración destinado a poner en común sus estructuras. Se trata, según dijeron fuentes conocedoras de la propuesta, de «un plan de fusión muy trabajado» en el que han colaborado las direcciones y los consejos rectores de los dos centros.

Esta es la única iniciativa de fusión real que han recibido los responsables de Economía, y en especial el director del Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial, Joaquín Ríos, interlocutor del Consell con Redit. El plazo para presentar propuestas finalizó el pasado 30 de octubre, pero la mayor parte de los centros ha solicitado prórrogas (que han sido concedidas) para elaborar nuevos planes de negocio tras conocer más al detalle los presupuestos de la Generalitat para 2014. «Están ganando tiempo. Parece que el Consell ha aflojado un poco en sus pretensiones y además ahora está demasiado ocupado en el follón que tienen con Canal Nou», afirma un directivo de uno de los institutos.

El Consell ha reducido de 32 a 24 millones, algo más de un 18 %, las partidas destinadas a financiar los centros asociados a Redit. No obstante, la rebaja es algo menor a lo que inicialmente se había trasladado a los institutos, que temían un recorte del 50 % de los fondos públicos. Pese a todo, desde 2010, los recursos públicos recibidos han caído un 44 %.

Desde el inicio de la crisis, todos institutos se han visto obligados a acometer ajustes en su estructura. Los catorce centros (contando al de la construcción Aidico, que ha salido de Redit) han sufrido 18 Expedientes de Regulación de Empleo. Centenares de técnicos e investigadores han perdido su empleo. Los comités de empresa cifran hasta en un 40 % el ajuste de las plantillas.

Alianzas y sinergias

La conselleria de Economía encargó a la consultora BDO un plan de reorganización de la red de institutos. La conclusión del estudio fue que debían adaptarse a la denominada Estrategia Europea 2020 de especialización inteligente, la conocida como RIS3. Esto supondría en la práctica reducir de catorce a cinco los centros nominales. Los institutos se agruparían en los cinco ejes del RIS -Bienes de consumo (Aitex e Inescoop); Manufacturas (Aiju, Itene, Aimme, Aimplas, ITE, ITI y Aido), Hábitat (Aidima, Aidico y ITC), y Alimentación (Ainía) y Salud (IBV). El conseller Máximo Buch y Joaquín Ríos trasladaron a Redit que las fusiones no son obligatorias, sino una recomendación. Los centros están planteando alternativas que pasan más por generar alianzas y generar sinergias para evitar así las absorciones.

Sea cuales sean las soluciones, los centros van a tener que adaptarse a un ejercicio de 2014 marcado por la sequía de fondos públicos procedentes de la Generalitat.