Carlos Slim ha alcanzado un acuerdo con la accionista de control de FCC, Esther Koplowitz, por el que el empresario se convierte en primer socio de referencia del grupo de construcción y servicios, en el que tomará una participación del 25,63 % tras una inversión de unos 650 millones de euros. La empresaria, por su parte, diluirá hasta el 22,43% la actual participación del 50,1% que ostenta en FCC, la compañía que fundó su padre y que preside y seguirá presidiendo su hija Esther.

Los nuevos socios han convenido una estructura de gestión «paritaria» para FCC, por la que tanto Koplowitz como Slim contarán con cuatro consejeros cada uno del total de doce que tendrá el nuevo consejo de administración de la empresa. Asimismo, cambiarán los estatutos sociales del grupo con el fin de que sea necesario el voto favorable de al menos el 50 % del capital, esto es, de los dos socios, para adoptar determinadas decisiones, como son el traslado de la sede social al extranjero o una ampliación de capital sin derecho de suscripción preferente. Slim abonará a Koplowitz un pago adicional en 2020 en función de la cotización de la acción de FCC. El grupo subió un 3,496% en la sesión de Bolsa de ayer, que concluyó a 15,840 euros por acción, precio que dobla al de 7,5 por título al que la compañía fijó la emisión de acciones de la ampliación de capital a la que ha acudido Slim.