Mercadona ha registrado unos resultados históricos en su cuenta de explotación de 2014 al obtener unos beneficios netos de 543 millones de euros, lo que supone un aumento del 5% en comparación con el año anterior, mientras que la cifra de facturación ascendió a 20.161, un 2% más que en 2013. La cadena que preside Juan Roig consolida su liderazgo en el negocio de la distribución en España y se propone abrir otras 60 tiendas durante 2015, con lo que su red comercial rozará los 1.600 supermercados, ahora ya en toda España tras la apertura de su primera superficie en Vitoria a finales del ejercicio anterior. Madrid, Cataluña y País Vasco serán áreas prioritarias para la expansión de la empresa valenciana en estos próximos años.

El grupo familiar de los Roig prevé invertir 650 millones en 2015 para ampliar su red comercial, así como para reformar 30 establecimientos y continuar con las obras del centro logístico de Abrera (Barcelona) e iniciar las infraestructuras del de Vitoria para su rápido crecimiento en el País Vasco y Navarra. Entre sus planes estratégicos destaca su apuesta por la transformación digital, simbolizada en el centro de proceso de datos en Albalat dels Sorells, que supondrá una inversión global de 120 millones. Allí centraliza sus operaciones informáticas de toda España.

El exterior tendrá que esperar

El dueño de Mercadona afirmó que la salida al exterior «tendrá que esperar», ya que, según Roig, primero quiere contribuir a consolidar la recuperación económica del país y «hacer sostenible la cadena agroalimentaria y satisfacer a los agricultores y ganaderos. Nuestra prioridad es crecer en España», zanjó el máximo responsable de la cadena de supermercados tras analizar hace años su posible implantación en otros países europeos.

A través de diferentes iniciativas, Mercadona ha conseguido bajar un 2 % los precios de su carro de la compra. Las marcas blancas „con enseñas como Hacendado, Deliplus, Campy y Bosque Verde„ continúan representando gran parte de su negocio. «Todos los bienes los producen fabricantes», destacó Roig en defensa de este tipo de enseñas. Mercadona cuenta desde 2014 con 14 nuevos interproveedores, con lo que ya aglutina a 120 grandes compañías cuya inversión ha superado la cifra de 500 millones de euros en sus 220 fábricas en España, donde han generado 1.500 empleos. También compra a 2.000 proveedores pertenecientes a 20.000 pymes. Por otro lado, asegura que ha reducido de 63 a 51 días el plazo de tiempo de los pagos a sus suministradores. «El 85% de las compras se hacen en España. Ya nos gustaría comprar el 100% en España, aunque no podemos adquirir el salmón de Noruega aquí, ni la isla de Hierro produce suficientes piñas para abastecer a nuestra cadena y hay que ir a Brasil», agregó.

Mercadona quiere aumentar un 1 % el beneficio neto de la compañía y un 2 % el volumen de ventas este ejercicio. Y espera rebajar un 1 % el precio del carro de la compra. En 2014 ha mantenido el volumen de empleo directo con 74.000 puestos de trabajo. No ha habido incremento neto tras causar baja un 2,5 % del personal.