El presidente de Bankia recordó ayer a los trabajadores de la entidad, alguno de cuyos representantes intervino en la junta de accionistas celebrada en el Palacio de Congresos de Valencia para protestar por los horarios y la dificultad de conciliar vida laboral y familiar con las aperturas vespertinas, que «sin clientes no hay crecimiento, ni salarios ni empleo». José Ignacio Goirigolzarri apuntó que los hábitos de los clientes están cambiando y la entidad debe adaptarse a sus necesidades. A este respecto, detalló que un 20 % de los usuarios del banco «pide ser atendido por la tarde», un porcentaje que llegaría al 40 % entre aquellos que usan la banca electrónica. En su opinión, «hay que dar ese servicio, porque si no lo dará otro competidor». Goirigolzarri afirmó que no se trata de elevar las horas trabajadas o de cambiar las condiciones de los empleados, «pero hay que adaptarse, porque si no lo hacemos tendremos que hablar» de puestos de trabajo. Bankia tiene en estos momentos 120 oficinas con un horario de ocho y cuarto de la mañana a seis y cuarto de la tarde. Una de las cosas que se negocia en el nuevo convenio es la flexibilidad. j. c. valencia