El juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu investigará a Banco de Madrid y a siete exmiembros del Consejo de Administración, entre ellos su expresidente José Pérez Fernández, por posible delito de blanqueo de capitales, al entender que podrían haber causado «numerosos» perjuicios no solo a los depositantes e inversores, sino a la propia entidad y a la economía nacional.

El magistrado ha admitido la querella presentada por las mercantiles Marine Instruments S.A. y Liunaski S.L. contra la entidad y contra los antiguos gestores de esta filial del Banco Privado de Andorra (BPA). En concreto, se dirige contra el expresidente y exdirector del servicio de Supervisión del Banco de España José Pérez Fernández; el ex consejero delegado Joan Pau Miquel Prats; los antiguos vocales Higini Cierco Noguer y Ramón Cierco Noguer; Ricard Climent Meca; Soledad Núñez Ramos, exdirectora general del Tesoro, y el entonces secretario Rodrigo Achirica Ortega.

En un auto, conocido ayer, Andreu pregunta a la Fiscalía Anticorrupción si ha abierto diligencias sobre estos hechos y, de ser así, solicita recabarlas para evitar duplicidades. El Servicio Ejecutivo de la Comisión de Prevención de Blanqueo de Capitales e Infracciones Monetarias (Sepblac) trasladó su denuncia al Ministerio Público tras investigar durante un año a la filial.

Los querellantes denunciaron ante la Audiencia Nacional por posible blanqueo de capitales al expresidente del Consejo de Administración, José Pérez Fernández, y sus antiguos vocales al sospechar que «pusieron la entidad a disposición de quienes quisieran blanquear dinero, suprimiendo o minimizando los controles internos a que venían obligados, no solo representándose y asumiendo la posibilidad de que fuera utilizada para mover u ocultar fondos de origen delictivo, sino incluso ofreciendo la entidad para dichos fines».

El Consejo de Banco Madrid, intervenido por el Banco de España el 10 de marzo tras la intervención de su matriz andorrana BPA, controlada por la familia Cierco, por supuesto blanqueo, dimitió en bloque un día después tras una reunión extraordinaria.

El valor de los fondos invertidos por Marine Instruments S.A. en el fondo de inversión Banco de Madrid Renta Fija F1 ascendía a 683.458,56 euros, mientras que las aportaciones de Liuniaski S.L., socio mayoritario de la primera, se elevaron hasta los 2,54 millones. Ambas se querellaron en la Audiencia Nacional contra la entidad y su equipo gestor.

El escrito de estos clientes de Banco Madrid relata los motivos por los que el Banco de España decidió intervenir la entidad bancaria, a raíz de la propuesta de actuación del Departamento del Tesoro de EEUU, respecto a su matriz, la Banca Privada de Andorra, al considerarla una institución financiera «sometida a primer orden de preocupación en materia de blanqueo de capitales».