El Juzgado de Instrucción número 11 de Valencia ha abierto diligencias penales para dilucidar posibles ilegalidades en la gestión de fondos públicos por parte de la Fundación Instituto Valenciano de Tecnología (Invate), una entidad sin ánimo de lucro vinculada al Colegio de Ingenieros Industriales de la Comunitat Valenciana. La causa alcanza también al centro tecnológico Lab Human, dependiente de la Universidad Politécnica de Valencia.
La investigación judicial se abrió a petición de la Fiscalía a raíz de una denuncia del propio patronato del Invate, renovado en febrero de 2014 después de que Miguel Muñoz Veiga fuese elegido decano del Colegio en sustitución de Javier Turégano. Los nuevos patronos, con Muñoz Veiga como presidente, auditaron los balances de la Fundación y reformularon las cuentas tras detectar un agujero patrimonial de 888.340 euros.
Los auditores detectaron deudas incobrables que abocaron a Invate a una situación de insolvencia. En octubre del año pasado, la entidad solicitó el preconcurso de acreedores y al no alcanzar un acuerdo solicitó el concurso definitivo, que fue declarado en marzo por el Juzgado Mercantil número 3 de Valencia. Los principales acreedores son el Ministerio de Industria, con cerca de medio millón de euros pendiente de cobro, la Agencia Tributaria, con una cantidad similar, una fundación del Colegio de Ingenieros de Extremadura y el propio colegio valenciano, al que el Invate adeuda algo más de 180.000 euros.
En paralelo a la reordenación de cuentas, los nuevos responsables remitieron a la Fiscalía información sobre presuntas irregularidades del anterior equipo. El Ministerio Público decidió a su vez denunciar los hechos ante el juez. También tienen constancia de las pesquisas el registro de fundaciones de la Generalitat y la delegación especial de la Agencia Tributaria en Valencia.
«El colegio es una víctima de la situación. Los estatutos de Invate reflejan su carácter independente y su autonomía de gestión. Se informaba al patronato pero la información no se correspondía con la situación real», dijeron fuentes del patronato. La Fundación Instituto Tecnológico de Tecnología se financia básicamente de las subvenciones que recibe del Ministerio de Industria, el Ivace y la Comisión Europea para el desarrollo de proyectos de I+D+i. «Se está mirando el uso que se ha hecho de esos fondos. Se está estudiando esa gestión», señalaron las mismas fuentes.
La investigación ha salpicado al exdecano y expresidente del Invate, Javier Turégano, y al exdirector-gerente Ignacio Vila. A falta de confirmación oficial, las fuentes consultadas señalaron que Turégano y Vila han resultado imputados, algo que ayer negó este último en declaraciones a Levante-EMV. Vila aseguró que han sido citados como testigos por el juez y que las pesquisas se centran fundamentalmente en el director del Lab Human, un centro tecnológico vinculado a la Universidad Politécnica de Valencia. Vila sostuvo que el juez ha imputado al director de este centro Mariano Alcañiz por no devolver un préstamo de un millón de euros dirigido a financiar las actividades de Lab Human en colaboración con el Invate. Según este exdirectivo el impago de esa deuda es lo que ha provocado el agujero de la fundación del Colegio de Ingenieros. «No hay irregularidades por parte nuestra. Yo era un mandado habría que preguntarles a ellos», apuntó en referencia Lab Human. Este diario trató ayer de contactar con Alcañiz para conocer su versión de los hechos y dejó mensaje en el propio centro de la Politécnica, pero no hubo respuesta. Según las fuentes consultadas, la propia universidad y su rector Francisco Mora tienen constancia de la posibles irregularidades.
Actividad bloqueada
La actividad del Invate se ha visto muy condicionada por la investigación de las presuntas irregularidades. La web de la Fundación está sin actualizar y las últimas entradas son de actividades de la primavera de 2014. El Instituto ha desarrollado proyectos ligados a la mejora de la competitividad de las empresas, casi siempre financiados por fondos procedentes de la Administraciones Públicas. Describe su misión como «promocionar, desarrollar y mejorar de forma continua el tejido empresarial», aunque en los últimos meses apenas ha puesto en marcha iniciativas como consecuencia de los problemas financieros por los que atraviesa.
