La fábrica inició en junio la fase de lanzamiento del S-Max, Galaxy y Mondeo Vignale, lo que supondrá un considerable aumento de carga de trabajo durante el segundo semestre de 2015. Según los planes que maneja la dirección, Almussafes tiene previsto fabricar 400.000 unidades este año. Eso supone un 40 % más que el anterior y podrá llegar a producir 450.000 automóviles, en función de la demanda, a partir del próximo ejercicio. La dirección y los sindicatos ya están coordinando planes de trabajo en el conjunto de plantas, que pasarán a montar cada día algo más de 2.000 unidades —seis modelos diferentes de vehículos— durante los tres turnos de trabajo. En tan solo ocho meses Ford ha construido otra nave de carrocerías de 89.000 metros cuadrados, una de las instalaciones más recientes de la factoría y que hace posible aumentar la capacidad de producción en comparación con la que tenía instalada hasta hace un año. La compañía incorpora instalaciones para poder equipar al nuevo Mondeo, que además tendrá una versión híbrida. El crecimiento de la planta valenciana se ha trasladado también hasta la industria de proveedores de la automoción. En el caso de Ford, la plantilla ya supera los 9.000 puestos de trabajo directos. j. l. z. valencia
