Las cooperativas agroalimentarias de la Comunitat Valenciana consiguieron una cifra de facturación de 2.0161 millones de euros durante su campaña 2013/2014, lo que supone un incremento del 10 % en comparación con la anterior. Este tirón de las ventas tiene que ver sobre todo por la mejora de las cifras de Anecoop „cooperativa de segundo grado líder en la exportación de cítricos en España„ y todavía no recogen el efecto del veto de Rusia a las exportaciones de la UE, que entró en marcha en agosto de 2014.

Sea como fuera, las cifras macroeconómicas por estas entidades de la economía social avalan la tesis de que las cooperativas agroalimentarias han sabido hacer frente a la crisis económica mejor que otros sectores productivos. Las exportaciones han alcanzado los 843 millones de euros, concentrándose principalmente en la UE (75 % del total). El sector concluyó la última temporada con algo más de 22.500 empleos, que suponen el 33 % del total de España. En cuanto al tipo de contratos, algo superior a los del ejercicio precedente, el 74% son de carácter fijo o fijo-discontinuo, mientras que el 26 % restante son empleos eventuales.

A pesar de la mejora del negocio, la realidad indica que la rentabilidad de los productores es cada vez menor. Durante su intervención en el acto de clausura de la asamblea, Cirilo Arnandis, presidente de Cooperatives Agro-alimentàries, aseguró que «se pueden contar con los dedos de una mano los productos que han sido verdaderamente rentables para nuestros agricultores, cuando debería ser justamente lo contrario». Arnandis lamentó el abandono de campos de cultivos.

La directora general de Empresas Agroalimentarias, Marta Valsangiacomo, instó a las cooperativas a acelerar los procesos de de integración para afrontar con mayor eficacia la competencia de otros países productores.