La Conselleria de Presidencia y Agricultura, Pesca, Alimentación y Agua ha dotado a los inspectores de campo con 15 nuevas tabletas para agilizar los controles de las ayudas comunitarias, según la Generalitat.

La introducción de este dispositivo electrónico para la gestión de datos se inició en 2014 y permite ahorrar un 25 % del tiempo en las visitas a las parcelas, lo que «redunda en una gestión más rápida y eficaz de los controles de la Política Agraria Común (PAC)», subrayan las mismas fuentes. Esta iniciativa se enmarca en el proyecto Sicrec, con el que la conselleria busca prestar un servicio más eficiente a los titulares de explotaciones agrícolas y mejorar las garantías de tramitación de las ayudas, que, en su conjunto, llegan a superar el 14 % de las rentas del sector agrario.

El personal de Agricultura encargado de control de campo cuenta con 65 dispositivos informáticos de alta conectividad GPRS con unas aplicaciones informáticas específicas sobre la gestión de las ayudas. El personal que se desplaza a las explotaciones puede realizar una evaluación rápida de las parcelas y puede transferir los datos a los sistemas de gestión de las ayudas.