La multinacional de origen danés AP Møller-Maersk Group, del que forman parte un conglomerado de 16 empresas entre las que se incluye Maersk Line „líder mundial en el transporte marítimo de contenedores„ ha llegado a un acuerdo para comprar la participación de Pérez y Cía en Grup TCB, propietario de grandes concesiones portuarias en España y a la sazón accionista mayoritario de la terminal de contenedores TCV del puerto de Valencia. Esta operación, de gran envergadura para el futuro del tráfico marítimo del Mediterráneo, sitúa a APM Terminals y su aliada Maersk en una posición de privilegio, al contar con muelles propios en el emplazamiento del Grao, cuyas instalaciones ubicadas en el muelle de Levante prevén generar un tráfico de 1,1 millón de contenedores en 2015, lo que supone una cuarta parte del total.

Con esta inversión, la mayor naviera del mundo controlará otras 11 terminales propias ubicadas en España (Barcelona, Castelló, Valencia, Gijón, Tenerife y Las Palmas) , así como en Esmirna (Turquía) y América (México, Cuatemala, Colombia y Brasil).

APM Terminals-Maersk toma posiciones en la costa mediterránea y, en particular, en el puerto de Valencia, donde podría convertirse en nuevo gestor de las futuras terminales de contenedores proyectadas en la macroampliación norte e incluidas en el plan estratégico de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV). La limitación de la actual zona de carga de TCV, que este año registra un notable incremento de actividad y en determinadas épocas del año ha llegado a la saturación, obligará al gigante del transporte y la logística a ocupar los espacios pendientes de construir en el puerto valenciano si continúa la tendencia de crecimiento en el tráfico marítimo.

Operadores privados

La APV negocia con operadores privados, grandes navieras y fondos de inversión la explotación de estas superficies para el transporte marítimo desde que lanzó su plan estratégico 2014-2020. Para ese último año espera rozar un tráfico de 6 millones de contenedores anuales, aunque el parón económico de China y los países emergentes, y la desaceleración del comercio mundial podrían frenar las espectativas, tal como ha advertido el recién nombrado presidente de la APV, Aurelio Martínez. Por el momento, en la citada macroampliación tan sólo se ha construido la primera fase del muelle de cruceros, mientras que la nueva terminal, sigue en construcción.

La compra de la participación de Pérez y Cía en APM Terminals, cuyo precio no ha sido desvelado aunque podría rondar los 1.250 millones de dólares, según fuentes portuarias, no altera la participación que las multinacionales Mitsubishi y Kamigumi mantienen en TCV Stevedoring Company, donde mantienen el 25 % del capital social de la firma estibadora valenciana.

El puerto de Castelló, reforzado

También el puerto de Castelló saldrá reforzado con la adquisición del grupo APM-Maersk. TCB compró recientemente la Terminal Polivalente de Castelló, que gestiona el 80% de los contenedores que se mueven en el puerto y que ahora cede a la multinacional danesa, que ya es mayoritaria en el tráfico marítimo en Algeciras (3,4 millones de TEU, contenedores de 20 pies) y Tánger-Med (tres millones de contenedores). En estos puertos gestiona sus principales muelles.

Las sociedades de TCB manejan una capacidad de producción anual de 4,3 millones de TEU. El consejero delegado del grupo TCB, Xavier Soucheiron, ha dicho que este acuerdo marca un «hito» en la trayectoria de TCB. Con esta operación, APM Terminals incrementa el número de instalaciones a 74 en puertos ubicados en 40 países de los cinco continentes.