La negociación en torno al modelo de Feria Valencia va encaminándose. La Conselleria de Economía parece dispuesta a aceptar la división en dos sociedades (una para el patrimonio y la deuda) y otra para la explotación del negocio siempre que el sector público tenga un peso específico en la toma de decisiones estratégicas.
Ayer, el presidente de la Feria y de la patronal autonómica, José Vicente González, recogió ese guante y apostó públicamente por un modelo de explotación comercial público-privada, con inclusión de la Generalitat y el Ayuntamiento de Valencia en la sociedad gestora «sea la proporción que sea». No obstante, advirtió que esa empresa responsable de generar negocio en Feria Valencia debe moverse «bajo los parámetros de las sociedades mercantiles en el mercado de libre competencia» y «no estar sujeta a trabas como la ley de Contratos del Estado». González aludió a razones de agilidad y flexibilidad en la toma de decisiones.
Por su parte, el alcalde de Valencia, Joan Ribó, aseguró que el modelo que va a defender el Ayuntamiento en Feria Valencia es uno «en el que la parte pública no desaparezca» aunque lo quiere «concretar» con el conseller de Economía Sostenible, Rafael Climent. Además, comentó que «la voz cantante» la debe llevar el Consell y no el consistorio. Según dijo, la de Feria Valencia «es una carga financiera muy importante que tiene que asumir la Generalitat», por lo que debe decidir el Consell. «Qui paga, mana» («quien paga, manda») señaló en referencia a que es el Consell quien debe liderar las negociaciones.
