La Asociación Valenciana de Empresarios (AVE) también comparte el diagnóstico que recientemente anunciaron el conseller de Hacienda, Vicente Soler, así como el de Economía, Rafael Climent, y que avala el resto del Ejecutivo autonómico presidido por Ximo Puig: «El cambio de modelo productivo en la economía valenciana es necesario». El lobby patronal que gobierna el naviero Vicente Boluda, quien ayer presentó el informe Caminos para mejorar la competitividad de las empresas valencianas „elaborado en colaboración con el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE)„ reconoce sin ambages al concluir el estudio «la existencia de una clara debilidad competitiva media frente a las regiones más competitivas: Madrid, Cataluña y País Vasco».
Esa debilidad, según el catedrático de la Universitat de València y director del IVIE, Francisco Pérez, «explica en gran medida la pérdida de peso relativo en el PIB español». También indica que la competitividad del tejido empresarial es «claramente» inferior al de las regiones más desarrolladas en España. De hecho, señala que sólo un 17 % de las empresas valencianas alcanza un nivel competitivo considerado «excelente», frente al 31% del País Vasco o el 25 % en Cataluña y Madrid. Además, la productividad del trabajo es un 20 % inferior a la media de la Unión Europea y muy por debajo de las citadas regiones.
Sectores poco avanzados
Las empresas valencianas se dedican a sectores poco avanzados, son demasiados pequeñas, apuestan poco por el capital humano, apenas salen a Bolsa y no fomentan las concentraciones. Según Pérez, la baja competitividad del tejido productivo „cuyo principal protagonismo en estos últimos años ha venido de la mano de la construcción y servicios de escaso valor añadido„ está relacionado con «su limitado tamaño y escasa especialización en actividades basadas en el conocimiento». De hecho, no hay más que mirar las empresas de nueva creación para darse cuenta de que las consideradas de mayor valor añadido (sanidad, jurídicas o educativas) solo acaparan tres de las diez actividades con mayor nacimiento de sociedades. Cataluña tiene siete.
El informe de AVE indica que el empresariado valenciano percibe un «apoyo insuficiente y falta de efectividad de la actuación política e institucional para la mejora de la competitividad». Los autores del estudio consideran que es posible alcanzar una competitividad excelente en la C. Valenciana porque hay empresas de diferentes sectores y características que lo están logrando, entre ellas BVAlve, DAS, Pamesa, Edicom, Dolz, Imegen, Martínez Cano, Natra Cacao, Tecnicartón y Tiba.
