Para mejorar la competitividad, las empresas deben orientarse al aprendizaje, tener mayor diversidad de perspectivas en los equipos directivos, apostar por el exterior con alianzas empresariales, así como profesionalizar la dirección, según el codirector del informe, el profesor de la Universitat de València Alejandro Escribá. «El gran reto de las empresas es conseguir la apertura de miras que necesitan los órganos que dirigen las empresas», concluye el estudio de AVE. j. l. z. valencia
