La obra pública ha sido el principal instrumento que ha utilizado la Administración para ajustar el presupuesto durante la crisis. El Estado pasó de invertir 35.354 millones de euros en 2009 a 21.590 en 2010 y a 10.854 millones en 2011. El año pasado la inversión total en España fue de 8.256 millones. Los constructores confían en que con la recuperación económica vuelva la inversión, pero de momento siguen haciendo ajustes de plantilla. Las dos últimas constructoras que se han visto obligadas a recortar personal han sido Sacyr y FCC. Sacyr anunció un ajuste de plantilla de 400 personas (el 30% del total) y FCC de 750 empleados (el 15%). Las constructoras Valencianas, según precisó Francisco Zamora, ya realizaron el ajuste durante la crisis. Zamora añadió que los grandes grupos han sustituido los proyectos en España por adjudicaciones en América, Norte de África y Europa del Este. r. f. valencia
