Los propietarios de una finca de cuatro edificios en la calle Martínez Aloy de Valencia lo han puesto a la venta por 2,6 millones de euros. La finca, que comercializa la empresa Llave Maestra, tiene cuatro mil metros cuadrados. Los cuatro edificios necesitan una rehabilitación integral. Fuentes cercanas a la operación precisaron que el metro cuadrado sale a mil euros cuando en la misma zona se están pagando hasta mil quinientos euros por viviendas que también necesitan reformas.

La calle Martínez Aloy está situada entre la avenida Pérez Galdós y la plaza Pintor Segrelles en el barrio de Arrancapins de Valencia. Por la operación se han interesado fondos e inversores que quieren rehabilitar la finca para vender las viviendas. La fachada tiene un nivel de protección dos, lo que implica que debe ser respetada.

En los cuatro edificios se pueden habilitar 64 apartamentos. Las viviendas estaban ocupadas hasta hace tres años. Las mismas fuentes incidieron en que todas están libres y en buen estado de conservación, aunque es necesaria la reforma. En la zona prácticamente no quedan solares para construir viviendas nuevas y los que hay son pequeños.

Alameda de Valencia

Por otra parte, el Grupo Alain ha comercializado en apenas una semanas 26 viviendas de lujo de una promoción de 63 en el Paseo de la Alameda de Valencia. Los pisos de obra nueva están siendo vendidos a partir de 300.000 euros. El proyecto se llama Alameda House Premium Residencial Valencia. El edificio se encuentra a escasos metros de la Ciudad de las Artes y las Ciencias, los jardines del Turia y el centro histórico. El edificio dispone de viviendas de tres y cuatro dormitorios, garajes y seguridad las 24 horas del día. Además, la azotea dispone de piscina.

El ritmo de ventas del edificio de lujo de la Alameda confirma la reactivación que está experimentando el mercado inmobiliario en Valencia. Alain todavía tiene disponibles pisos de 135 metros cuadrados y tres habitaciones por 345.000 euros. Las plazas de garaje cuestan 21.000 euros.

Hace dos semanas, una treintena de personas esperó durante horas la apertura de la oficina de ventas de Solvia en la avenida Baleares de Valencia para reservar un piso de una promoción que la inmobiliaria va a construir junto a la avenida de Francia. El primero de la fila permaneció en la cola durante treinta horas porque quería garantizarse la compra tras quedarse sin vivienda en la promoción de 36 pisos en la avenida Alfahuir que Solvia colocó en 36 horas. La cola por la promoción de Solvia junto a la avenida de Francia se formaron a pesar de que los pisos más baratos costaban más de doscientos mil euros.