La industria del automóvil se ha convertido en un sector estratégico para el Puerto de Valencia, con un crecimiento exponencial durante los años de la crisis. El incremento desde 2011 en el total de tráfico de vehículos alcanza prácticamente el 68%. Se ha pasado de los 409.515 vehículos exportados e importados ese año a los más de 687.000 al cierre de 2015, según las estadísticas de la Autoridad Portuaria de Valencia, que gestiona los puertos de Valencia, Sagunt y Gandia.
Se trata de un incremento asociado a la frenética actividad de los fabricantes españoles. En torno al 85% de los coches que se fabrican en España están destinados al comercio exterior. Y en su gran mayoría, la vía de salida son los puertos.
Sin embargo, más que un crecimiento que es responsabilidad en gran parte de la producción de Ford, el análisis que se celebra en la Autoridad Portuaria es el aumento de su cuota de mercado. Los puertos de Valencia y Sagunt han pasado de mover menos del 15% del total español, a un 21 % al cierre de 2015 y un 22,2% en el primer trimestre de este año.
La APV ha conseguido arrebatar negocio a la competencia. «El mercado mundial de fabricación y venta de vehículos va en aumento. Volvemos a consumir más coches pero ese mercado nuevo no lo absorben todos los puertos por igual», explican desde la entidad.
Barcelona, que tiene en el fabricante Nissan un impacto similar al que Ford genera en Valencia, continúa siendo el primer puerto en movimiento de vehículos. Ha mantenido su cuota de mercado en torno al 30%, y un millón de vehículos movidos.
Sin embargo, Valencia se ha convertido en el segundo al adelantar al puerto de Vigo, que ha pasado de tener un tráfico de 462.000 vehículos a 441.000. Su cuota de mercado ha retrocedido del 16,6% al 13,4%.
También Valencia ha incrementado su distancia con el puerto de Pasaia (Bilbao), cuyo movimiento se ha estancado en torno a 250.000 vehículos y representa menos de un 7,5% del tráfico estatal. El incremento valenciano también ha sido superior al del enclave de Santander, que se ha quedado en el 14% de cuota. La APV, de hecho, ya mueve más que el conjunto del resto de puertos.
La Autoridad Portuaria presume de haberse convertido en un puerto «multimarca y multidestino». Su poderío en este sector está íntimamente ligado a Ford, que es responsable del 84% de las exportaciones de vehículos desde Valencia. Pero también está captando tráfico a través del corredor de Madrid de compañías como Iveco (Madrid y Valladolid) y Renault (Palencia).
Igualmente, General Motors envia dos trenes semanales desde Zaragoza, pese al estado de la línea que pasa por Teruel, necesitada de una inversión de 40 millones que no entra en los planes del Ministerio de Fomento.
Cada tren puede acoger 210 vehículos. La alternativa por carretera obliga a movilizar 26 camiones. «Los fabricantes cada vez más nos piden esta conectividad ferroviaria», explican desde el Puerto.
Por ahí pasan los planes de crecimiento de los puertos valencianos: mejorar las conexiones ferroviarias para acercarse a todos los fabricantes españoles.
