La startup valenciana Navlandis acaba de abrir su primera ronda de financiación en busca de inversores locales. La firma que ha diseñado un innovador contenedor marítimo para mercancías plegable aspira en principio a entre 125.000 y 150.000 euros, con el objetivo de lanzar definitivamente el proyecto.

Tras tener el prototipo casi listo quiere utilizar este capital para acelerar la actividad comercializadora y lanzar al mercado el producto. De momento, con la reuniones de inversión mantenidas se cubren por completo las expectativas de inversión debido al interés generado, señalan desde la empresa. Con todo, están en conversaciones con diversos fondos que han expresado también su interés por estudiar el proyecto.

El pasado martes ya comenzaron los contactos con BigBan Angels, una entidad valenciana con un centenar de socios que agrupa a aceleradoras, bussines angels, fondos de capital riesgo, clubs de inversores, etcétera.

Después de seducir a la Autoridad Portuaria de Valencia con un proyecto que dota de una pátina de emprendimiento e I+D al entorno del Puerto, el objetivo de la empresa liderada por Miguel Navalón es conquistar ahora a las navieras. Para el segundo semestre del año tiene previsto presentar el contenedor en las instalaciones del Puerto de Valencia.

Feria de Rotterdam en noviembre

Igualmente tiene como objetivo acudir a la feria internacional del sector, que se celebra en Rotterdam (Holanda) en noviembre, para exponer el producto. Los planes de la firma son ambiciosos. Navlandis fue desarrollada en Climate-KIC, aceleradora de la Unión Europea liderada por la asociación de empresas de las energías renovables (Avaesen), cuyo presidente es Marcos Lacruz, quien ejerce de consejero de la firma y tiene previsto participar en la ronda de financiación.

Para 2017 la empresa tiene el objetivo de colocar unas 300 unidades en el mercado para que las grandes navieras comiencen a testar el contenedor. Con esos números Navlandis estaría en una valoración cercana a cuatro millones de euros, apuntan, y aspiraría a una ronda de inversión mayor, en torno a los 400.000 euros, y futuras rondas con objetivos más altos.

Su CEO, Miguel Navalón, está convencido de que este contenedor plegable puede ser revolucionario para el sector. Según explica, el coste actual de trasladar un contenedor vacío a un lugar donde sea necesario es de unos 500 dólares. Ese reposicionamiento puede reducirse a la mitad. En el espacio que ocupa un contenedor vacío caben cinco plegados.

Competencia holandesa

Ya existe una empresa holandesa que ha lanzado contenedor similar. No obstante, adquiere especial interés para las navieras que operan en el Puerto de Valencia, líder de tráfico de contenedores. En estos momentos se calcula que existe un parque mundial de contenedores marítimos de 40 millones de unidades (TEU's), y en 2014 las navieras compraron 5 millones de contenedores nuevos, un mercado en el que Navlandis busca su posicionamiento.

Navalón asegura que el contenedor plegable que lanzarán al mercado «tendrá la misma resistencia que uno convencional, y se podrá manipular con la maquinaria que cualquier puerto de mercancías tiene y con los mínimos recursos humanos para hacer competitivos los costes operacionales», a lo que añade que el mercado mundial de contenedores «se cifra en unos 12 billones de dólares anuales».