El promotor de Dénia Enrique Pla y el valenciano Enrique Ballester tienen prácticamente cerrado un acuerdo con un inversor por el que percibirán unos 20 millones de euros por la planta baja y las dos primeras (una es el entresuelo) del número 2 de la calle Colón de Valencia, según fuentes conocedoras de la operación. La venta millonaria se produce un año después de que los empresarios adquirieran por subasta a la Seguridad Social este emblemático edificio de la capital por el que abonaron 14,2 millones. Una plusvalía de 6 millones de euros en un solo año en el mercado por menos de la mitad del inmueble de nueve plantas.

Las tres plantas que han vendido los empresarios están en este momento en negociación para ser arrendadas por el grupo Inditex, que prevé montar la tienda de referencia de su versión más juvenil Pull and Bear, según la mismas fuentes. Los actuales propietarios, que han hecho las operaciones a través de la empresa Riera y Nat, son quienes habrían alquilado al grupo Inditex de Amancio Ortega. La operación de venta por veinte millones se cerrará, según el preacuerdo, cuando haya licencia de apertura por parte del Ayuntamiento de Valencia y el arrendatario pueda empezar a operar, según las mismas fuentes explicaron a Levante-EMV.

La subasta pública por la que Riera Nat se quedó el edificio se celebró el pasado 8 de julio de 2015 y atrajo principalmente la atención de inversores locales, pero también de fondos con sede en Madrid. El edificio tiene nueve plantas y contiene espacios residenciales, de oficinas y tres bajos, de los que uno lo ocupa la propia Tesorería. Este inmueble, de más de 500 metros en pleno chaflán de Colón con la calle Russafa, es el gran atractivo del edificio.

Otro debate que subyace tras esta operación inmobiliaria es la manera en que la Administración se deshace de su patrimonio. La Seguridad Social pedía por el edificio 7,9 millones de euros, siendo la mejor oferta la de Pla y Ballester con una subida del 78 %. Aún así, un año después, solo dos plantas y el bajo están a punto de venderse por alrededor de veinte millones de euros. Una operación redonda para los inversores valencianos que todavía tienen para vender seis planta para oficinas o viviendas.

Recientemente y ante el encarecimiento de Madrid y Barcelona, Valencia se ha convertido en el principal atractivo de los inversores para tener oficinas y bajos a precios mucho mejores. Además, no ha pasado desapercibido el incremento del turismo desestacionalizado que aumenta por semanas en la capital del Túria.

Zona de gran interés comercial

Por su parte, con la política restrictiva en apertura en domingos parece ser que la ciudad irá a una sola zona de libertad horaria o ninguna. En caso de que se impusiera la tesis de una sola calle, como marca la ley estatal, sería Colón la que tendría estos privilegios. Y es en esta céntrica vía donde se están posicionando todos los grandes operadores de moda. Primark tendrá una salida a esta vía y Mango ya ha anunciado una «megatienda» en la zona. Pull and Bear en el número 2 de Colón sería la confirmación, aunque desde Inditex ayer no quisieron confirmar su entrada pese a que ya disponen de un Zara y un Oysho.