La Comunitat Valenciana perdió el año pasado 433 firmas que se instalaron en otras autonomías y ganó 357 que llegaron de fuera. Madrid, con un régimen fiscal para las personas físicas y grandes patrimonios más favorable que el valenciano, atrajo a 153 compañías, según reveló el periódico Expansión. Los asesores fiscales creen que la fuga de empresas es una situación puntual y descartan que el cambio político vivido en la Comunitat Valenciana o el régimen impositivo esté detrás. En cualquier caso, el saldo es negativo y las tres provincias han perdido en términos netos 76 empresas, el cuarto mayo éxodo empresarial tras Cataluña, Castilla y León y Castilla-La Mancha.

La Comunitat Valenciana era históricamente una ganadora en los movimientos empresariales. En el año 2014 ganó 36 empresas. Sin embargo, la tendencia se rompió el año pasado, según se desprende de la base de datos agencia de rating española Asexor.

La autonomía más perjudicada por el traslado de empresas en el último año ha sido Cataluña, con un saldo neto negativo de -471 empresas (478 compañías se han mudado a Cataluña en el último año y 949 se han ido).

En el caso de la Comunitat Valenciana, a las 153 empresas que se fueron a Madrid hay que sumar 70 que emigraron a Andalucía y 59 que se marcharon a Murcia. Francisco Serantes „delegado territorial en Valencia y Castelló de la Asociación Española de Asesores Fiscales„ apuntó que sí se puede haber producido una «deslocalización de empresarios como personas físicas» por las ventajas fiscales que ofrece Madrid, pero descartó que sea algo preocupante e incidió en que los beneficios no son para personas jurídicas. «Puede ser interesante irse a Madrid para una persona física» con un patrimonio importante, «pero para una sociedad no tiene mucho sentido. Puede que esta situación sea algo coyuntural». El experto también incidió en que el cambio político en la C. Valenciana «tampoco es preocupante para las sociedades».