La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) recomienda replantear la figura de los consejos reguladores de las Denominaciones de Origen (DOP) e Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP) de ámbito territorial supraautonómico y sus funciones. En concreto, la CNMC ha publicado un informe sobre un proyecto de real decreto que desarrolla las DOP e IGP, que afecta sobre todo al sector vitivinícola, ya que considera que este sector muestra una creciente importancia en número de productos protegidos y, especialmente, en su valor económico.

Competencia ha detectado en el modelo de DOP e IGP una serie de restricciones a la competencia tanto en el proyecto de real decreto como en la Ley que éste desarrolla, que no fue remitida para informe. Entre las recomendaciones que realiza la CNMC, desde la óptica de la promoción de la competencia y la regulación económica eficiente, figura la de replantear la figura de los consejos reguladores y sus funciones, en especial su posible atribución de personalidad jurídica pública.

Competencia cree que las amplias facultades que otorga la ley y el propio reglamento a los consejos reguladores suscita importantes restricciones a la competencia. En particular, respecto a la entrada de nuevos operadores, a su capacidad de competir, al acceso a información comercialmente sensible y al establecimiento de límites a la producción y transformación o la autorización de cualquier aspecto de coyuntura anual que pueda influir en estos procesos.

Modelo de control

Además, recomienda ajustar el modelo de control previsto a las recomendaciones sentadas por la autoridad de competencia y de la propia CE para asegurar en todo caso la separación de las funciones de gestión y de control de la DOP/IGP, y eliminar la atribución en exclusiva, sin condicionamiento alguno, del control oficial a una única entidad. En ese sentido, la CNMC aboga por adoptar un modelo de control oficial que cuente con un proceso abierto.