El macroproyecto comercial y de ocio para Paterna, Puerto Mediterráneo, que se presentaba como el mayor complejo de Europa, se convirtió ayer en otra más de las iniciativas que pudieron ser y pasarán de largo por la Comunitat Valenciana. La Comisión de Evaluación Ambiental, formada por técnicos y altos cargos de las consellerias de Medio Ambiente y Obras Públicas, lo ha tumbado con un informe ambiental desfavorable.

Básicamente, se alega la afectación del proyecto a las carreteras CV-35 y CV-31 que darían acceso al parque; la contaminación ambiental que provocará el incremento del tráfico, así como el ruido y peligro para el suministro de agua, y la protección de la partida de la Mola de Paterna, «la única gran bolsa de suelo no urbanizable común que hay en el área metropolitana, si descontamos la zona del plan de l´Horta», apunta el informe.

Se imponen finalmente las tesis de Compromís, cuya ala ecologista controla Medio Ambiente y se quedó con las competencias de evaluación ambiental en el reparto del Botànic. Pero el rechazo a la inversión tampoco provoca un drama en la Conselleria de Obras Públicas, que instruye el expediente y que está dirigida por la socialista María José Salvador. Priman «la seguridad jurídica» y se asumen los argumentos técnicos. La Conselleria firmará en los próximas días la resolución que cierra esta Actuación Territorial Estratégica (ATE): «Es definitivo», confirman.

Con esta negativa, se renuncia a una inversión extranjera cercana a 800 millones que preveía un impacto laboral de 4.000 empleos para la zona. Detrás de ellos está la joint venture formada por el fondo Eurofund y por el grupo británico especializado en gestión de centros comerciales Intu, líder en Reino Unido y uno de los que más está creciendo en España.

Tras el proceso de ayer, la tramitación vuelve ahora a la Conselleria de Obras Públicas, el «órgano sustantivo» de la actuación territorial estratégica y el responsable de firmar la resolución que ponga fin al proyecto, una vez tenga el informe ambiental.

El proyecto, heredado del Consell del PP, utilizó esta vía de la ATE, una figura creada por los populares con la que se pretendía acelerar los proyectos y lanzarlos en poco más de seis meses. Nada más lejos de la realidad. Puerto Mediterráneo, que saltó a la luz hace un lustro, fue declarado como ATE hace más de tres años y medio.

En todo caso, desde la Comisión de Evaluación Ambiental insistieron ayer en que sus argumentos no son políticos sino «técnicos». Y cerraban la puerta a que con este veredicto haya un plan b para los promotores. «Las condiciones, ubicación y características hacen muy difícil enmendar el proyecto para hacerlo viable. Hablaríamos de proyectos diferentes. Las limitaciones son técnicamente muy evidentes. Todas las cuestiones de obligado cumplimiento no se han cumplido. El informe es desfavorable», sentenció el secretario autonómico de Medio Ambiente, Julià Álvaro, que preside esta comisión.

La resolución de este órgano ha provocado el desconcierto entre el grupo inversor, que no se pronunciará hasta conocer de forma oficial el dictamen. En estos momentos sus opciones se encaminan únicamente hacia la vía del recurso, ya sea administrativo o judicial, según confirmaron fuentes empresariales. Intu Eurofund lleva cinco años trabajando el proyecto y cuenta con el apoyo jurídico de Broseta para la elaboración del proyecto. La batalla judicial está servida.

Informes de última hora definitivos

Su sorpresa ha sido mayúscula tras cosechar un reguero de informes «favorables» desde que hace tres años y medios el proyecto se declaró como ATE. Tras un año de espera a que el proyecto pasara por esta comisión ambiental, hace pocas semanas llegaron sendos informes de Carreteras (Fomento y especialmente de la subdirección general de Movilidad, de la propia Conselleria de Territorio) aportando nuevos argumentos contrarios que a la postre han sido definitivos.

El equipo jurídico del grupo promotor había introducido varios cambios que fueron remitidos a la conselleria. Pero ayer el departamento de Movilidad de Obras Públicas puso sobre la mesa un nuevo informe negativo, considerando que las deficiencias del proyecto son irreversibles. Fin a otro proyecto inversor.