La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja) se personará en la causa penal abierta contra uno de los mayores entramados dedicados a la estafa sistemática de agricultores y que ha sido desmantelado en una operación de la Guardia Civil. Según indicó ayer la organización, siete personas han sido detenidas como presuntos cabecillas y testaferros de esta red que ha dejado sin pagar unos 5 millones de euros a más de 500 citricultores de las provincias de Valencia y Alicante.

Según las averiguaciones efectuadas durante el último año por la Benemérita, este grupo de presuntos delincuentes creó a lo largo de los últimos años al menos cinco empresas pantalla que utilizaban para dar una sensación de aparente solvencia y adquirir la fruta a los agricultores, tal como informa Europa Press. Sin embargo, meses después y a la hora de hacer efectivos los pagos acordados, los responsables de dichas empresas desaparecían de escena y los testaferros carecían de patrimonio personal con el que poder abonar las cosechas. «Cada año operaban en una zona diferente con el objeto de ocultar el rastro de sus fechorías y poder así seguir repitiendo la estafa», indicaron desde la organización agraria.

AVA-Asaja explicó que el caso se encuentra en fase de instrucción en el Juzgado de Primera Instancia número 5 de Sueca y la acusación a la que se enfrentan los arrestados podría ser por delitos de estafa, pertenencia a organización o grupo criminal, blanqueo de capitales y delitos contra la Hacienda Pública.

La organización hizo un llamamiento a los agricultores que recientemente hayan sufrido impagos para que se pongan en contacto con sus servicios jurídicos y, si constatan que han sido víctimas de algunas de las estafas cometidas por estas empresas ficticias, se sumen a la acusación única que presentará AVA-Asaja.

Nacionalidades

La organización agraria valenciana valoró muy positivamente la actuación y la colaboración de los grupos ROCA de la Guardia Civil, dedicados específicamente a la delincuencia en el medio rural, y de manera muy especial el trabajo desarrollado por el cuartel de Tavernes de la Valldigna, que ha investigado «con eficacia las múltiples ramificaciones de este entramado».

De los siete detenidos, de nacionalidades española y armenia, cinco han sido puestos a disposición judicial y tres de ellos ya han ingresado en la prisión de Picassent.