El presidente de Puertos del Estado, José Llorca, ha resuelto ya un protocolo de actuación en el que insta a la Autoridades Portuarias a vigilar los servicios mínimos establecidos «levantando las correspondientes actas en caso de incumplimiento de acuerdo con los partes de trabajo». Fomento quiere garantizar la actividad, algo que será difícil dado el masivo seguimiento que tienen las huelgas portuarias y que afectará también a los camioneros, que también podrían dejar de trabajar al paralizarse la actividad en los muelles. Policía Portuaria, Nacional, Local y Guardia Civil han creado el Cecor (centro de coordinación), que estará preparado para actuar ante cualquier problema de seguridad.

El protocolo de Fomento contempla la creación de un comité de contingencias encargado del seguimiento de la huelga. Las Autoridades Portuarias recabarán de las sociedades de estiba la información sobre el seguimiento de las movilizaciones. Por otro lado, las Fuerzas Armadas actuarán si lo pide el Consejo de Ministros tras decretar el estado de alarma, según advierte el Gobierno.

Sevasa-Sagep, empresa que opera en el puerto de València controlada por las grandes firmas que operan en el recinto del Grao (Noatum, MSC y APM Terminals), antes del inicio de la huelga ya comunica «con periodicidad diaria y en términos porcentuales» los rendimientos desarrollados en el puerto en relación con el habitual. Así lo reclama el citado protocolo.

«Evitar la huelga»

El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, pidió ayer a los sindicatos de estibadores que «recojan el guante» lanzado por las empresas del sector con su compromiso de mantener el empleo de este colectivo e «intensifiquen» las negociaciones para llegar a un acuerdo y, en último término, evitar la huelga. De la Serna advierte a los grupos de que si no apoyan la reforma los «españoles afrontarán una multa europea de sus bolsillos».