Huelga a la vista. La validación del real decreto de reforma del sector de la estiba en el Congreso de los Diputados inicia un nuevo calendario de movilizaciones en los puertos españoles (los días 24, 26, 29 y 31 de mayo y 2, 5, 7 y 9 de junio), lo que augura un período de conflictividad laboral con impacto notable en el comercio exterior, tanto en importaciones como exportaciones. Las centrales tienen previsto celebrar hoy nuevas asambleas de trabajadores en el Puerto de València y causarán el cierre de terminales de mercancías y el probable colapso de camiones en los accesos terrestres al recinto.

Según fuentes de Sevasa, las marchas lentas provocaron ayer una caída de la actividad del 30 % en comparación con una jornada normal en el emplazamiento valenciano, una situación que se viene repitiendo a lo largo de esta semana. Los paros encubiertos también afectan a los puertos de Algeciras y Barcelona y todo parece indicar que obligarán a las navieras a tomar alternativas para descargar mercancías a partir de la próxima semana. Sin embargo, tal como anunció ayer el sindicato internacional IDC, los estibadores tratarán de impedir que los buques con destino a los puertos españoles puedan hacer escalas en Portugal, Francia, Italia y Marruecos.

Sectores afectados

La industria pesada y otros sectores exportadores -sobre todo las fábricas del automóviles y la cerámica- miran con preocupación el futuro del transporte marítimo tras la aprobación de un real decreto que fue convalidado con 174 votos a favor (PP, Cs, PNV, Foro Asturias y UPN), 165 en contra (PSOE, Unidos Podemos, ERC y Compromís) y 8 abstenciones de PDeCAT.

Mientras tanto, la Confederación Empresarial Valenciana (CEV), que celebró una reunión de sus órganos de gobierno considera «inadmisible» la situación en los puertos y la presión realizada por el sector de la estiba ralentizando los ritmos de la actividad portuaria. La entidad presidido por Salvador Navarro exige la paralización de lo que consideran es «una huelga encubierta e ilegal que perjudica a las empresas del sector y a toda la economía productiva».

El Ministerio de Fomento, Íñigo de la Serna, prevé mandar a Bruselas inmediatamente la convalidación del real decreto-ley que liberaliza la estiba para que se desestime «lo antes posible»el procedimiento abierto a España y las multas pendientes. El debate concluyó con una monumental bronca con una veintena de representantes de los estibadores, que desde la tribuna de invitados, increparon al portavoz del PP, el castellonense Miguel Barrachina, y que finalmente se marcharon del hemiciclo.