La responsable del sector financiero en UGT-PV, Marta Benito, aseguró ayer que la operación por la que el Banco Santander se ha quedado por un euro el Popular tiene muchas similitudes con la que abocó al Banco de Valencia a ser adquirido por idéntica cantidad tras ser intervenido en noviembre de 2011. La gran diferencia es que antes de venderlo a CaixaBank, el fondo público FROB tuvo que inyectar en torno a 5.500 millones de euros en la entidad valenciana.
Benito declaró a este diario que «pasó lo mismo con el Banco de Valencia». Se refiere a que, tras la venta por un precio simbólico, la entidad adquiriente «se benefició de los importantes activos que tenía» la entidad valenciana, que inmediatamente incorporó a su balance. Aquella operación, además, permitió que CaixaBank no incurriera en pérdidas en 2012, entre otros motivos por los créditos fiscales que engulló del banco valenciano. Un caso parecido fue el de la caja alicantina CAM, intervenida en julio de 2011 por el FROB y vendida unos meses más tarde al Banco Sabadell por un euro. La inyección de capital de casi 6.000 millones se hizo a través del Fondo de Garantía de Depósitos y la operación incluía un Esquema de Protección de Activos a diez año.
