La exigencia de devolución de los gastos hipotecarios ha disparado en el primer cuatrimestre de este año las reclamaciones que los usuarios presentan ante el Banco de España, según los datos facilitados ayer por el organismo supervisor. Al igual que en el año precedente, en 2016 se registró una nueva reducción en el número de reclamaciones, en concreto cayeron un 28,6 %, hasta las 14.462, un dato que venía a corroborar la tendencia descendente iniciada en 2013, cuando se alcanzó el máximo histórico de 34.645.

No obstante, entre enero y abril de 2017, el descontento de los clientes bancarios ha vuelto a elevarse. Solo en esos cuatro meses, las reclamaciones rondan las ocho mil, con lo que el Banco de España augura que el ejercicio terminará cerca de las 30.000.

En la memoria de su servicio de reclamaciones, el supervisor concluye que el motivo principal de este incremento es la «generalización, desde finales de 2016, de las solicitudes que las entidades bancarias están recibiendo de sus clientes para la devolución de los gastos de formalización de los préstamos hipotecarios al albur de la sentencia del Tribunal Supremo que declaró abusivas determinadas cláusulas», entre ellas la que atribuye gastos de la operación al consumidor.

La disminución de 2016 fue porcentualmente muy inferior en la Comunitat Valenciana respecto de la media nacional, ya que se quedó en solo el 8,8 %, desde las 1.615 de 2015 a las 1.473 de un año más tarde. Pese al descenso, subió a la tercera posición en el escalafón por autonomías, tras Andalucía y Madrid y por delante de Cataluña, que la superaba en 2015. El Banco de España explica que la reducción registrada en el pasado ejercicio fue especialmente significativa en el caso de las cláusulas suelo, que pasaron de representar un 46 % del total en 2015 a ser un 27 % (3.954) en 2016. La memoria expone que la proliferación de sentencias sobre cláusulas suelo «permite suponer que existe un creciente uso de la vía judicial para dilucidar las controversias, circunstancia que, sumada a una mayor propensión de las entidades a cerrar acuerdos de resolución amistosa con sus clientes», explica «el menor recurso al sistema de reclamaciones».

Dado que la sede de este organismo se encuentra en Madrid, es allí donde se concentra el mayor número de reclamaciones, concretamente 11.346 del citado total. A continuación, figuran Sevilla (602), Barcelona (364) y València (231). En este último caso, la cifra de 2016 es inferior a las 355 de 2015.

Del total de reclamaciones del año pasado, un 71,1 % finalizó en sentido favorable a los intereses del reclamante. La Caja Rural del Sur fue la entidad financiera con un porcentaje de informes favorables al cliente -excluidas las cláusulas suelo- más alto, con un 87,2 %. De las principales firmas financieras que operan en la Comunitat Valenciana, en quinto lugar aparece Cajamar, con un 77,6 %. Más atrás figuran CaixaBank (64,7 %), Bankia (59,6 %), BBVA (47,4 %) y Banco Sabadell (46,5 %). En cuanto al porcentaje de rectificaciones sobre informes favorables al reclamante, el primer lugar lo ocupa ING Direct, con un 91,7 %. Le siguen el BBVA (81,1 %) y Cajamar (67,5 %). En el caso de Bankia, el dato baja al 36,2 %, en CaixaBank, al 38,8 % y en el Sabadell, al 56,8 %.