Entrar a trabajar antes de su hora le ha costado el puesto al empleado de un supermercado en Barcelona. Jean P. ha sido despedido porque llegaba al establecimiento, de la cadena Lidl y en el que ejercía de gerente, incluso una hora antes y se ponía a preparar el local antes de la apertura sin fichar.

En su carta de despido, la empresa señala que "realizaba pedidos, cambiaba precios o reponía palés enteros de artículos", según informa El País. La compañía considera que el trabajador ha cometido "incumplimientos laborales muy graves".

Revisando las imágenes de seguridad, comprobaron que Jean entraba al supermercado a las cinco de la mañana y estaba "entre 49 y 87 minutos" trabajando sin fichar. Lidl señala en la carta de despido que el empleado vulneraba así la norma que indica que "cada minuto que se trabaja, se paga, y cada minuto que se trabaja debe quedar registrado".

Además, según la compañía alemana, Jean, que llevaba desde 2005 trabajando en Lidl, invitó a otros empleados a llegar antes al trabajo. Y en muchas ocasiones estaba en el establecimiento solo, lo que está prohibido por "seguridad".

El trabajador ha denunciado su despido y ha asegurado que se vio obligado a trabajar más porque el supermercado había sido reestructurado y los cambios "requerían tiempo y dedicación", algo que, según él, sabían sus jefes.