La fábrica de la mítica marca de lencería Little Kiss, un emblema en la población de l´Eliana, va a tener un nuevo uso. Tras varios años cerrada, el ayuntamiento de la localidad del Camp de Túria acaba de conceder la licencia para la implantación de un supermercado de la cadena alemana Aldi.
La firma de ropa íntima fue a liquidación en 2013. Pasó de ser noticia en 2009 por sus acuerdos con el Real Madrid para producirles una colección y ser una de las firmas punteras en el panorama nacional, a un ERE en 2010, el concurso voluntario en 2012 y la liquidación por orden judicial en 2013.
Según trasladan desde la Concejalía de Urbanismo, se trata de «una alegría» que otra empresa se ubique en estas instalaciones, paradas desde hace años. Además del supermercado, las obras dejarán espacio para algún local más, para que el no se conoce todavía destino definitivo, así como un aparcamiento.
A efectos urbanísticos, no ha habido grandes problemas para conceder la autorización, ya que no supone ningún cambio de uso en la parcela, que pasará del industrial a comercial.
El nuevo destino para esta empresa que dio trabajo a cientos de mujeres elianeras desde los años 70, ha generado, sin embargo, alguna tensión. El centro de emergencias de la Generalitat, el 112, que se encuentra junto a la antigua fábrica de lencería, presentó alegaciones a la conversión de estos terrenos en un supermercado.
Los responsables de Emergencias estaban especialmente preocupados por la posibilidad de que el paso de los camiones de mercancías por el acceso que da al 112 pudiera provocar colapsos y bloquear la salida de los vehículos emergencias. Desde el ayuntamiento confirman que se ha pedido al promotor que se modifique la entrada y se ha atendido la propuesta.
Además, la Asociación de Comerciantes de l´Eliana ha trasladado su disgusto con una nueva iniciativa comercial que entiende que puede dar lugar a un área con más oferta. La entidad ya protestó hace unos meses por la puesta en marcha de un proyecto, en la Manzana 51, que pretende crear un área de unos 2.000 metros cuadrados en una pequeña unidad comercial con algunos locales y hostelería.
Con todo, desde el ayuntamiento deslizan que ese proyecto está ahora mismo en «standby», a la espera también de estudios de evaluación ambiental.
